UY Press - Agencia uruguaya de noticias

25.05.2012

MONTEVIDEO (Uypress) - La presunta amante del rey Juan Carlos de Borbón, la princesa alemana Corinna zu Sayn-Wittgenstein, se ha convertido en 'asunto de Estado' en España luego de la aparición de comentarios periodísticos sobre las reiteradas y públicas infidelidades del monarca.

Este nuevo escándalo coincide con los 50 años de casados de los reyes, que no se festejó 'por problema de agenda'. El origen de la polémica fue la cacería de elefantes en Botsuana, en abril pasado, en la que el monarca fue fotografiado con quien llaman 'su amante', y tuvo que volver a causa de una caída y rotura de cadera, lo que ha causado una gran repulsa en la sociedad española.

La princesa alemana Corinna, casada y divorciada en dos ocasiones, es reproducida por todos los medios de prensa de la península ibérica acompañando al rey en sus correrías por el continente negro. Se dejó de hablar en susurros y a viva voz se dice que los reyes duermen en habitaciones separadas y que su relación es un simple 'contrato', dejando de ser fábulas las andanzas con otras damas por parte del monarca.

La revista 'Vanity Fair' publica un reportaje sobre la historia y la personalidad de esta mujer, que califican de 'arribista' y de 'lista, atractiva y divertida. La cita perfecta'. La supuesta amante del rey nació en Francfort el 28 de enero 1965 y es hija de Finn Bonning Larsen, responsable de la aerolínea brasileña Varig en Europa, y de Ingrid Sauer. 'Corinna estudió en la Universidad Webstter de Ginebra. Después se trasladó a París, donde conoció a su primer marido, el empresario Philip Adkins, con quien tiene una hija de 20 años. En Londres se casó en 2000 con el príncipe alemán Casimir zu Sayn-Wittgenstein, de quien se divorció en 2005 y con quien tiene un hijo de diez años'.

Coincidieron en la cacería el monarca español y la princesa alemana ya que 'Era un viaje de familia y amigos. El empresario sirio Mohamed Eyad Kayali, un hombre muy generoso, nos invitó a todos, incluido el rey. Era, sobre todo, el viaje de dos personas mayores que querían estar en la selva juntos, probablemente por última vez en su vida, hablando frente al fuego, compartiendo experiencias entre los hipopótamos y los leones. Yo estaba allí porque conozco muy bien África y porque Corinna había querido llevar a su hijo pequeño. Tengo una excelente relación con el niño, era la primera vez que él iba a un safari y ella se sentía más segura si yo estaba ahí', relató Adkins, el empresario y primer marido de Corinna.

Conocidos de la princesa, la describen de la siguiente forma: 'Corinna empezó cobrando por la organización de safaris de lujo. Luego, como los conocía, ponía en contacto a algunos de los hombres más poderosos de Estados Unidos, Oriente Medio y Europa. Invitados que desarrollaban allí futuras transacciones. Acabó por cerrar los tratos en los países de origen y llevarse así suculentas comisiones. Entre la aristocracia inglesa y alemana se habla de ella desde hace varios años. Siempre se ha comentado que se casó para obtener un título y un pequeño principito. La princesa lleva muchos años viajando con el rey. Es una especie de asesora'.

r.c.