ENTREVISTA

Los futbolistas uruguayos Cristián "Killy" González y Daniel Gutiérrez recuerdan sus años en Israel

08.12.2015

MONTEVIDEO (Uypress/Ana Jerozolimski) - El encuentro estaba planeado de a tres, o sea, cuatro con la autora de estas líneas. Los convocados eran tres futbolistas uruguayos que jugaron años atrás en Israel: Cristian "Killy" González, Daniel Gutiérrez y Marcelo Garate. A último momento Marcelo se complicó y nosotros sentimos su ausencia, dado que durante su estadía en Israel y gracias a que jugó en Hapoel de Jerusalem, habíamos alcanzado a entablar una cercana amistad que se mantiene hasta hoy.

Pero sus colegas, con los que fue un gran placer conversar personalmente, reflejaron lo que también él siente respecto a Israel-nos consta-, aunque su estadía en el país fue mucho más corta, en gran medida por la mala fortuna de haberse lesionado poco después de comenzar a jugar.

Daniel Gutiérrez nos recibió en su casa en Palermo, lo cual hizo posible el gran placer de verlo personalmente, tras haberlo entrevistado por escrito hace unos años para "Semanario Hebreo".   La ocasión fue para él apropiada para practicar su hebreo un tanto dormido, pero evidentemente  bien recordado.

Allí llegó también Cristian "Killy" González, a quien habíamos tenido el gusto de recibir en nuestra casa en Jerusalem junto a su esposa, compartiendo con nuestra familia, en una larga mesa, una cena de Pesaj (la Pascua Judía) en el 2011, habiendo estado además en su casa en Ashdod, junto a un gran amigo común, también uruguayo por cierto, Ruben Friedmann de Ein Hashlosha, que solía ser el encargado de llevar los alfajores.

Ante varias frases que Daniel dice en hebreo, Cristian bromea  acotando que "a mí también me quedaron varias palabras, pero lo mío fue más rústico".

 

El texto que aquí publicamos, es un resumen de la entrevista con Cristian y Daniel, en la que nuestro énfasis fue por cierto la vivencia humana de ambos, no el análisis desde un punto de vista futbolístico, en el cual nosotros no sabríamos entrar.

 

Quisiera ante  todo agradecerles mucho que hayamos podido armar este encuentro, aunque nos falta Marcelo Garate..A vos Daniel por dar tu casa para reunirnos, a vos Cristian por haber llegado especialmente de Atlántida..Ambos pasaron épocas interesantes en Israel, pero también momentos difíciles. Daniel, vos llegaste justo cuando empezó la segunda intifada a fin del 2000. Vos Killy, los cohetes de Gaza cuando estabas en Ashdod. Y a eso tan complejo, se suma el  desafío de estar en un lugar tan diferente, ¿no? ¿Qué les dejó entonces la experiencia israelí?

Daniel Gutiérrez: A mí en lo humano me dejó mucho más que en lo económico, pero la verdad que si hoy me preguntás si lo volvería a hacer,sí,  lo volvería a hacer, porque me enseñó mucha cosa. Además, cosas prácticas concretas. Me permitió  aprender a hablar inglés, tas haber ido  con lo básico. Después ,aprender el idioma hebreo, que obviamente no lo sé hablar perfecto pero sí me las arreglo.Y por supuesto,  convivir en un país que es diferente a todos, como siempre digo. Israel es único, no sólo por los problemas que tiene, es único por las cosas lindas que tiene, porque es un país donde hay una comunión de gente de todas partes del mundo, con diferentes costumbres y culturas...y vas aprendiendo un poco de todo.

Además siempre digo que soy un agradecido por cómo me recibieron, no tengo palabras. El pueblo de Israel en ese sentido siempre fue muy hospitalario, siempre haciéndote sentir bien, mostrando las costumbres, las culturas, las fiestas, invitándote a las casas de amigos, de dirigentes, de presidentes. Siempre haciéndonos sentir bien.

La verdad que fue una experiencia espectacular que hasta el día de hoy me quedó marcada, y como tú dijiste hoy antes de la entrevista, que tenés una parte acá y una parte allá, yo siempre digo lo mismo: que me quedo con una parte de acá y una parte de allá. La verdad que siempre soy un agradecido a Israel.

 

Me alegra mucho escuchar este resumen Daniel..Y vos Cristian  ¿ cómo lo ves?

Cristian González: También. Remarcaría lo que dijo Daniel. Yo llego a Israel en una parte importante de mi carrera como futbolista. Venía  de estar jugando las eliminatorias con Uruguay y fue una decisión media complicada, porque estaba en Peñarol con un año más de contrato -que sabemos que aquí en Uruguay jugar en Peñarol es muy importante por lo que implica-. Fueron momentos en los que había que tomar decisiones y lo que me queda es eso, de no haberme arrepentido de la decisión que tomé, que fue ir a un país que no conocía. Sabía que iba a ser muy difícil de antemano y lo fue.

Yo siempre digo que hay cosas que uno lo vivió y no es que no lo desee, pero es lindo vivirlo, sentirlo y ver de qué manera el israelí, el judío lo vive, lo siente. Aparte de todo eso, la clase humana del israelí a mí me dejó contento y me sentía muy cómodo en todo momento. Siempre estuvieron cerca de mí, porque nunca me dejaron de lado. Tanto mi señora como yo, siempre estuvimos cómodos, por más que estábamos lejos de la familia.

 

LA IMPORTANCIA DE NO ESTAR SOLOS

Me acuerdo bien de tu esposa Karina...sumamente simpática y llena de energía. Y recuerdo que yo pensé siempre que se los veía super enamorados.

Cristian: Sí, la verdad que si. Y más allá de todo yo siempre digo que somos grandes amigos.  Es que,la verdad, uno puede hablar de estar casado o no estar casado, pero la amistad y el respeto son fundamentales. Por suerte es una persona que estuvo conmigo desde que yo fui a Israel, un país muy complicado -más que nada en el sentido de lo que es el idioma y el cambio de costumbre a lo que es vivir en Uruguay-. Uno valora eso, que siempre estuvo hombro con hombro conmigo, y en el momento difícil es cuando uno valora a la persona que uno tiene al lado.

Cuando es todo fácil es otra cosa.  Daniel, yo  recuerdo que me habías mandado fotos con tu familia. Para vos también, supongo, estar con Lorena, que es además la mamá de tus divinos mellizos -los melli, como dice Ruben-  fue un gran apoyo.

Daniel: Claro.  Con Lorena hace 20 años que estamos juntos, a los 19 años me ennovié con ella. Tenemos 10 años de novios y 10 de casados. Y también, como dice Killy, sin una mujer que te haya bancado y te haya respetado sería más difícil...Porque obviamente que hubo momentos en los que no estuvimos juntos allá, tuvimos períodos en los que yo estuve prácticamente un año lejos de ella y de los nenes porque el embarazo de los mellizos  fue complicado. O sea, queríamos que estuviera más cerca de la familia y hubo una parte del embarazo, desde los tres meses, que ella se vino... Y bueno, [estuve] seis meses solo, después vine, los vi y después me fui de vuelta. Entre idas y vueltas, pero siempre acompañando y apoyando porque si no tenés ese apoyo, es difícil solo.

 

 

DANIEL GUTIÉRREZ  (40)

Jugó en Israel entre el 2000 y 2006, cinco años neto, ya que tuvo dos períodos en Uruguay en el medio.

Su primer equipo en Israel fue Hapoel BeitShean. Luego volvió por seis meses a Uruguay, jugó en Rentistas, y viajó nuevamente a Israel.Estuvo dos años en Macabi Hertzlia , pasó a  Hapoel Nazaret Ilit, que ascendió a Primera.

Volvió a Uruguay a jugar en Liverpool , jugó luego en  Hapoel Haifa y  finalmente a  Betar Beer Sheba.
Al retornar definitivamente a Uruguay jugó en Juventud, Miramar y por último en Boston River.


Al retirarse como jugador propiamente dicho, se dedicó a las ediciones de video, al armado de los  compactos de las mejores jugadas para  los futbolistas, que sirven como carta de presentación para poder conseguir un equipo en el exterior. Luego empezó con intermediaciones con jugadores y hoy en día ya está más vinculado al tema de la representación, con 15 jugadores.

UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE

 

¿En algún momento dudaron si valía la pena la experiencia israelí?

Cristian : No, fue  una experiencia única, no me arrepiento de haber tomado esa decisión en ese momento. Fueron seis años inolvidables. Ojalá que tenga la suerte hoy o mañana de volver a ir a ese país, a ver gente que uno dejó como amigo y que estuvo apoyándome en momentos difíciles y lindos también, porque el fútbol también lo disfruté mucho. Es un fútbol que yo siempre digo que crece muy rápido, ha crecido muy rápido y va a seguir creciendo. Porque, como dice Daniel, el haber tanta gente de tantos lugares, enriquece... Es llamativo que lleguen jugadores y técnicos de distintos lugares de Europa, eso hace que el fútbol israelí esté creciendo tan rápido, así que es una cantidad de cosas.

Esto, claro, aparte  de lo que es el país en sí, por toda la historia que tiene, por esos lugares increíbles que uno conoció gracias al fútbol. Soy sincero: nunca imaginé llegar a conocer esos lugares que tiene Israel ,históricos. Imaginate que por ahí pasa de lado un poco lo económico, porque humanamente a mí me cambió en una cantidad de cosas: en la forma de pensar, al ver  cómo esas personas -sabiendo los problemas de guerra que hay y siempre con esa inseguridad ahí en la frontera, que siempre tiene que estar a la expectativa- viven el día a día, disfrutan, aman su país y lo defienden.

 

LA SEGURIDAD Y EL TEMOR

Vos Daniel,  viviste la segunda Intifada que estalló muy poco después de tu llegada. ¿Cómo fue  esa vivencia en tu caso? Sabemos bien que hay ahora un riesgo de seguridad en Uruguay, por lo que llamamos problemas de delincuencia "común" y quizás es más  probable que a uno  lo maten para robarle, que le caiga un cohete encima en Israel. Pero que un ómnibus estalle por una bomba es algo muy singular. ¿Cómo podías , llegado de Uruguay, entender algo así?

Daniel : Mirá, en realidad uno cuando está ahí no sé si es por un poco de inconsciencia o qué, pero no tiene miedo. Yo fui con un objetivo, que era mejorar en lo deportivo. En ese momento lo mejor que tenía era ir a Israel, era una oportunidad que no podía dejar pasar y me aferré a eso. Después lo demás no me importaba nada. Te soy sincero: mi familia sufría más de lo que podía sufrir yo porque al estar acá no conocés lo que pasa allá, mirás las cadenas internacionales, ves atentados... Me llamaban, me preguntaban: "¿Estás bien?", les tenía que explicar que a mí no me  pasa nada, que está todo bien, que son cosas por ahí como las que te pueden pasar acá, de un accidente o cualquier otra cosa. Uno se acostumbra a vivir como vive el pueblo israelí también, el pueblo israelí no vive con miedo. Estará en el inconsciente, la verdad que nunca lo percibís. Aprendés a pensar cómo se vive allá y la verdad que me adapté bien. Me costó el primer año, después al segundo año creo que estaba bien adaptado y la verdad que no tengo ningún tipo de problema.

Cristian, yo recuerdo tus cuentos, en tu casa en Ashdod, sobre cómo vos y Karina tenían que entrar al refugio cuando sonaba la alarma por los cohetes....

Cristian : Yo tuve dos etapas. Una fue diferente porque fue en el norte, cuando el problema con Líbano, con Hezbolá, en el 2006.  El problema grande fue en enero de 2008, cuando yo tuve la suerte de poder venirme una semana a pasar la Navidad acá con la familia. Cuando estaba para salir para allá de vuelta me entero que desde Palestina estaban lanzando cohetes hacia el sur de Israel, más allá de que era esporádico, como que era el comienzo de algo que se veía venir. Pero hasta que no pasa uno como que lo ve distante, y cuando llegué al aeropuerto -ese momento me va a quedar para toda la vida-: yo iba en el taxi hablando con el tachero, que hablaba español porque lo habían mandado del club, y tuve la suerte de que me fue explicando de qué manera manejarme, porque ya estaba complicado el tema. Como que uno internamente piensa que nunca lo va a vivir, que nunca le va a tocar.

"Eso les pasa a los otros", es lo que uno piensa. 

Cristian : Esa imagen de llegar a Ashdod por la ruta y tener que parar el taxi porque hay alarma....es fuerte.  Yo no entendía nada y el taxista me explicó que había alarma en Ashdod en ese momento y que había que esperar cinco minutos. Ahí como que dije: "¿Qué hago acá?". Me acuerdo que siempre que me volvía a Israel siempre dejaba a mis hermanos, a mis padres. Lo cuento porque es algo que viví, yo me quedo llorando, sabiendo que a los pocos meses iba a volver, pero yo me quedo llorando. Imaginate, lloraba hasta España y de España a Tel Aviv... Pero es algo que uno lo vive y lo cuenta con gracia porque me pasaba. Yo decía: "¿Qué hago acá?" Esto, a pocos días de terminar el año y entrando a una ciudad donde  cada pocas horas estaba sonando una alarma y tenías que refugiarte.

 

CRISTIAN GONZÁLEZ (izquierda) (38)


Jugó en Israel del 2005 al 2011. Llegó al país llevado por Macabi Tel Aviv, donde pasó   su primer año.

Luego jugó cuatro años seguidos en Ashdof F.C. En el medio volvió por seis meses a Defensor en  Uruguay, tras lo cual jugó otro año en Israel con Ashdod. Su último año en Israel fue en Beitar Jerusalem.


Hace ya cuatro años que está  en River Plate, donde sostiene que "la gente me tiene mucho cariño y me siento muy cómodo". Pero además está preparándose, en un curso especial, para ser entrenador de fútbol.

Yo tenía mi refugio en el apartamento, que era nuevo. Siempre digo, no se lo deseo a nadie lo que viví. No me arrepiento porque fue una decisión mía. Fue un mes largo, porque fue prácticamente un mes, una vivencia jodida de vivir. Es algo que el israelí, que vive en ese país, sabe que le puede pasar frecuentemente . Y la gente allí, con una idiosincracia que tiene mucho que ver con el hecho que están rodeados de países en conflicto, sabe que en  cualquier momento puede pasar.

 

JUZGAR A ISRAEL

Los judíos uruguayos, estemos acá o allá , sentimos a menudo que no se entiende bien en Uruguay  la situación que se impone  a Israel.En la guerra de hace poco más de un año, hubo inclusive serias expresiones  antisemitas que cruzaron una línea roja. Cuando ustedes vivieron esas situaciones  ¿tuvieron oportunidad de explicar cómo se vive del lado israelí?

Cristian: A mí ese año en particular me llamaron de radios de Uruguay, de Radio Oriental y de Sport 890, más que nada pidiéndome mi opinión, y uno por ahí puede pecar de atrevido en comentar. Yo creo que la prensa internacional estaba siendo un poco injusta con Israel, yo allá el canal que tenía en español era Televisión Española y es un canal que -siempre lo digo y fue tal cual- dejé de ver aunque era el  único canal que tenía en español. Dejé de verlo como un par de meses porque cada vez que veía un informativo, apuntaba hacia Israel injustamente, presentándolo como único culpable de la situación.

Ellos decían todo el tiempo que Israel mataba gente inocente, y uno que está allá y sabe cómo es el tema, sabe que los mismos terroristas agarraban a la gente bien como escudo humano. Repito, son problemas que por ahí el israelí propio lo entiendey uno puede pecar de atrevido en entrar profundamente sobre el tema. Pero sí puedo decir con seguridad  que Israel defiende su tierra y su gente. Hay gente que lo entenderá y gente que no.

 

EL HEBREO

Daniel, cuando te mostré las fotos de mis hijos me preguntaste si hicieron la  tzava, o sea el ejército, usando el término en hebreo.  Entiendo que durante  tu estadía tocaste esa realidad, extraña en Uruguay y común en Israel, de pibes jóvenes que deben hacer su servicio militar a los 18 años.  ¿Cómo viviste eso? ¿Fue por tus compañeros en los equipos , que también lo habían hecho?

Daniel : Yo justo tuve en 2004 un compañero argentino, Guillermo Israelevich, al que le tocó hacer la tzavá (el ejército)  y un poco me contaba cómo era. Él lo hizo con gusto, la verdad que lo hizo con placer, no todos lo pueden hacer así. Me contaba un poco lo difícil que era tener a los compañeros llegar al entrenamiento con el fusil, dejarlo colgado ahí, cambiarse, entrenar y después irse a la tzava de vuelta. A los más jóvenes, que estaban haciendo el servicio, los dejaban ir a entrena y  después regresaban. Me acuerdo también de conversar con las familias, de quedarse con el corazón en la boca de que no los llamaran , si estaban en el l frente y demás. Pero bueno, sí, siempre estuve al tanto de todo, cómo era.

 

Aparte  de "tzavá", ¿qué se acuerdan en hebreo?

Daniel: "Aní iajól ledaber ivrit.Aní zojér"...

Muy bien! Podés hablar hebreo, te acordás, como recién dijiste..

Daniel: Sí, algo me acuerdo. Lo que pasa es que, claro,hace ya muchos años que no lo hablo, y si  no practicás es difícil.

Cristian : Lo mío fue diferente ..aunque recuerdo muchas palabras, fue más rústico, porque yo me descansé mucho en Karina, que aprendió el hebreo.

Daniel: ¿Fue a aprender? Lorena fue al Ulpán.

Cristian: Sí, Karina fue al Ulpán y sabe hasta escribir. Ella lo hizo. Y la verdad, al tener amigas y amigos israelíes la ayudó muchísimo. Y bueno, yo me descansé en ella.

No me extraña nada  que Karina  se haya hecho amigos israelíes .Recuerdo su energía, super dinámica...

Cristian: Sigue igual. Y estuvo bueno porque al conocer gente de allá mismo, no es que ella era amiga de una uruguaya de allá, hizo amigas israelíes y como que fue más profunda la forma de hablar.

¿Dónde las conocía?

Cristian: Hubo una persona, una amiga que cuando llegamos a Macabi Tel Aviv la conoció de ahí mismo, de Tel Aviv, que iba al fútbol y la conoció en el estadio. Ya en Ashdod como que era más familiar, y en Ulpán, al ser una ciudad más chica que Tel Aviv, como que era más barrial el tema y  también encontró gente de distintos países de Sudamérica pero ya hablando el hebreo con otra calidez. Eso también la ayudó a ella a saber expresarse.

 

PUENTES ABIERTOS

¿Hay algo más que les gustaría comentar?

Daniel: En lo personal ,que tengo los mejores recuerdos de Israel y que, como dijo el Killy hace un rato, tengo unas ganas bárbaras de volver para ver cómo está el país ahora, porque hace mucho tiempo que no voy, y para saludar toda esa gente y esos amigos que uno fue dejando -en el fútbol y fuera del fútbol- que siempre te llaman todos los años: "Dale, vení, vení, vení". A veces a uno le da pereza porque es un viaje tan largo y dependés de disponer como de 15 o 20 días, que a veces no  tenés. Pero bueno, la verdad que, como te dije anteriormente, los mejores recuerdos y muy agradecido siempre.

Cristian: Bueno también, como decía Daniel, siempre uno tiene internamente esas ganas de ir, antes digamos como futbolista, quizás mañana simplemente para saludar gente que uno dejó allá y que siempre estuvo. Muchos uruguayos que nos abrieron las puertas de sus casas, que es lo lindo, ¿no?,la confianza, saber que uno más allá de estar haciendo lo que le gusta -que es en definitiva jugar al fútbol, que es nuestra pasión- también tenía vida personal. Estar solo en un país es complicado, como decía Daniel, la gente esa que siempre estuvo con nosotros, que hoy o mañana ojalá que uno pueda volver a saludar, y mismo israelíes con los que uno todavía tiene contacto.  Eso dice que uno hizo bien las cosas y actuó bien. Creo que cuando las personas se dirigen a uno de una forma es porque uno también actuó de esa forma, en buena forma. Imaginate que eso te deja contento.

Daniel: Estar tanto tiempo en Israel como estuvimos nosotros no es fácil, hay gente que ha ido dos o tres meses y se ha venido. En cierta medida fuimos un poco embajadores de Uruguay en Israel, porque obviamente allá nadie conoce cómo es acá, y el fútbol es momentáneo pero lo que se deja es la persona, es lo que puedas cosechar como persona, como ser humano. Eso es muy importante, creo que en ese sentido cumplimos con el deber que todo uruguayo tiene que cumplir.

Y  eso pasa, claro, por la forma en que ustedes actúan, así que el buen trato es una calle de doble vía...

Cristian: Esto que decís me recuerda algo que me pasó, que me gustaría contarte, aunque es algo personal que me pasó en Macabi Tel Aviv, Daniel sabe, un equipo que hoy en día es uno de los mejoresen el tema económico. Cuando yo fui, yo siempre lo digo porque es así: te pagan por adelantado, fue increíble llegar a ese club. A mí me pasó que yo había llegado a Uruguay después de terminar el contrato con Macabi y vi que me habían girado 10 mil dólares de más, que no eran míos. Obviamente. Me llegaron  por error . Al otro díame empezaron a llamar por teléfono, yo estaba de vacaciones y tenía una cantidad de llamadas de Israel y no entendía nada. Yo sin saber, ¿no?

¿No sabías todavía del depósito?

Cristian: Claro. Atendí y me habló en ese momento la persona que siempre estaba conmigo, que hablaba español, diciéndome el error había habido. Y uno, como actúa en la vida, como soy yo, le dije: "Quedate tranquilo que al otro día la plata está allá de vuelta". Pasó así y evidentemente para mí esa era la única opción .Además, creo que cuando actúa bien siempre tiene las puertas abiertas y sigue teniendo esos contactos.Y yo sigo teniendo esos  amigos en Israel.

Una anécdota, si cabe el término, simbólica. Gracias a ambos. Un placer verlos y escucharlos.

Actualidad
2015-12-08T11:30:00

UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias