Tiempo tormentoso
Stella Maris Zaffaroni
31.12.2020
El día estaba raro y yo también, toda la noche revolviéndome en la cama, desperté amortajada por las sábanas, no sabía cómo salir de ese embrollo. Desarmé la cama e iba camino al lavarropas cuando me vino un flash, un retazo de un sueño, pasó como un rayo y me dejó una estela de desolación.
Con la mano en el corazón, me quedé ahí, detenida frente al cuadro de abuelo.
Suspiré, le tiré un beso a abuelo y seguí.
Estaba tomando mi tecito con limón, y seguía presente en mí esa cosa rara, eso que me andaba por el costado izquierdo del pecho.
-¿Cómo te sentís, cómo dormiste, estás bien?, bueno me alegro- dijo Macarena sin respirar.
-Estoy... es raro, no tengo claro cómo me siento- me dejé caer en el sillón.
-¿Hay agua caliente?- blandía el termo, se lo quité de las manos y me fui a cargarlo a la cocina.
-Salgamos a recolectar firmas contra la LUC.
-Ay, no sé, ¿sería onda demasiado Partido Comunista?
-¡No!, todo el mundo tiene que firmar.
-No digas pavadas, los que están de acuerdo con la LUC ¿para qué van a firmar?
-Eso es importantísimo, los que están de acuerdo deben firmar porque lo que estamos firmando es que el pueblo sea el que decide.
-Ah, ¿en qué mundo vivo?, yo convencida que firmábamos en contra. Si firmamos todos es para- sacudí la cabeza-... ¡no entiendo nada!
-Adorada pichoncita ¿te acordás cómo fue el proceso de la LUC?
-Onda meteorito, ¡zuuum! y se fue.
-Por eso, ¿cuánto tiempo se discutió?
-¿Se discutió?, ¿no ves que vivo en babia?, nunca me enteré.
-Ni tú ni nadie, fue sin tiempo, en medio de la cuarentena, no sé cómo explicarte.
-¿Un polvo exprés en el paredón del cementerio?
Macarena quedó con los ojos cuadrados.
-Te desconozco- le sacó el tapón al termo- ¿qué yuyo pusiste acá?
-Ay bueno- dije toda colorada- quise salir con una de las tuyas.
- Acordate que al PIT-CNT le dieron media hora en el Parlamento ¡media hora a la central de los trabajadores! y cuando terminó de exponer ¡nada, silencio, ni una pregunta!
-O sea que nos , por nos, me refiero a "el sobrerano", Juan Pueblo, el Reyecito nos fifó, nos violó.
-Chichí ¿estás con la idea fifa?
-Desde que me alborotaste con lo de buscar novio-asentí y me revolví en el asiento- y es verano, tengo la piel al aire, con esa leve traspiración, y como frutas que chorrean jugo desde mis labios- me acariciaba- y llega la noche y me revuelco en esa cama tibia...
-¡Chichí!- Macarena me miraba como a una aparición- Cortala que me estremezco.
- Bueno- dije- me arreglé el pelo, me sequé la babita que me corría por el mentón, acomodé mis ropas y la miré- En realidad todo esto que dije fue tan cierto como la promesa del Reyecito Pou Street de no meter la mano en el bolsillo de Jua Pueblo.
-Ah- suspiró y cebó el mate- yo creía que era como la parte del discurso en que dijo: Voy a aflojarles el cinturón.
-¡Ni me lo recuerdes!, de culo al aire nos quiere, ¡será lascivo!
-Inclemente, nos mete los aumentos de tarifas por encima de la inflación y nos encaja un 2% de aumento de salarios.
- Nos bajan los pantalones y nos fifan por el upite- la miré- ahora lo dije en tono modosito ¿viste?
-Nada de modosito, ¡se había pactado aumento...!
-Macarena ¡la última! usan al Antel Arena para justificar el aumento. La Divina Carolina usó un fideicomiso para el Arena, ¡nada que ver!, no saben ni mentir.
-Che, viste que la inflación prevista para fin de año es de 9,5%.
-También vi que el dólar está planchado, almidonado, no se movió casi en todo el año.
-Ni me digas. yo que pensaba especular con los que tengo en el banco- se agarró la cabeza-¡perdí mismo!
-¿Tenés muchos dólares en al banco?
-Y como 1300- dijo sacando pecho.
Extendí la mano y la acaricié.
Abro Montevideo Portal y quedo dura.
-Macarena ¡se murió Pierre Cardin!
-Nooo, justo al inicio de la temporada- se tapó la boca- estuve frívola.
-Tenía 98 años.
-¡Qué lo parió!
-Ah, el Senado argentino legalizó el aborto voluntario.
Macarena se chupó el dedo e hizo un tilde en el aire, luego aplaudió.
-Un país más y van...Toy felí.
-La que está furiosa es la Canosa esa, pone: "Argentina: MUERTE".
-¿Tu vecina canosa , la de 10°?
-No, la argentina de la tele.
-Hermana, la tele de Buenos Aires, la farándula, son de lo que no hay, salite de ahí.
-Acá dice algo que no entiendo: Luego de que El Dipy filtrara polémicos tuits de La Faraona y lo denunciaran por "oda a la pedofilia", el youtuber explica las razones de su exilio.
-Seguí leyendo a ver si le pescamos la onda.
-Martín Cirio se va a vivir a Turquía tras ser denunciado por incitación a la pedofilia.
Macarena se enderezó como cacatúa espantada.
- Dice: "No voy a caretear el motivo por el que me estoy yendo a Turquía. No es un motivo feliz. La realidad es que llegó un punto en el que me está costando mucho funcionar.
-El Martín es La Faraona, parece- dijo aún con las plumas erizadas.
- Acá hay declaraciones de Rial, otro que reparte mierda cono licuadora sin tapa. Pará que leo- me ajusté los lentes: "Esta es La Faraona, un ser espantoso en todo sentido, de donde lo mires", La Faraona lo dejó por escrito, eh... 'qué ganas de violarme un pendejo'- Miré a Macarena y me rasqué la cabeza- ¿Eso canta? Sigo leyéndote: Lo dejó por escrito, nadie hizo nada, se le dio manija y espacio, ¿hasta cuándo?".
Se instaló en el patio del naranjo uno de esos silencios que se oyen, que retumban.
El cielo estaba tan negro que encendimos la luz.
-Acá no tenés lamparita de bajo consumo- me advirtió Macarena y con la misma la quitó.
Fui a la despensa a buscar una lamparita y me veo la harina integral.
-Che, ¿qué comemos hoy?, tenemos la harina integral que compramos en aquel mercado.
-Hagamos pan.
-Llueve.
-¿Pensás amasar afuera?, qué importa que llueva.
-No leuda igual.
-No compliques el día- me pasaba un delantal.
Ella se fue para la despensa, yo entré a preparar todo en la cocina.
-¿Cuál pan hacemos?
-Integral no- dije- a mis tripas no les gusta.
- ¡Y para qué compraste esta harina! - blandía el paquete.
-Me encantó el envoltorio, tan retro, es divino-se lo saqué de las manos y lo acaricié.
-Bueno, busquemos una receta.
- Hagamos croquetas.
- ¡Sí!, de arroz como hacía la abuela.
-¿Te acordás?, le poníamos un pedazo de ajo Enel medio.- crucé los brazos y puse mi mano sobre la boca sonriente.
-Mire si me voy a olvidar; nos ataba el pelo- tomamos gomas y lo hicimos- nos ponía el delantal- nos lo pusimos- y nos mandaba a lavar las manos.
- "Hasta los codos"- dijimos a dúo.
Entonces, a medida que íbamos recordando, el pasado se fue metiendo despacito entre nosotras. Las palabras iban tejiendo una red de recuerdos que nos envolvió y volvimos a tener 12 años, a estar en casa de abuela, a oler su perfume; Emerode, de Coty, los recuerdos caían como las gotas de la lluvia y se fue disolviendo el hoy, se disipó el estrés y hubo un alivio en el corazón.
Chichí
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias