¿Qué somos? Esteban Valenti

29.07.2025

Esta es una columna extra, no es el resultado solo de la reflexión sino de la bronca creciente. La insensibilidad y la indiferencia ante la masacre DIARIA de decenas de miles de personas en la franja de Gaza, la mayoría niños y mujeres, por parte del ejercito genocida de Israel y el apoyo de una parte importante de la colectividad judía en Uruguay me asquea, me subleva. ¿Qué somos?

El sábado pasado, un día invernal helado, unos pocos cientos de personas manifestamos frente a la embajada de EE.UU. cómplice e impulsor del genocidio. No vi un solo dirigente del Frente Amplio, ni de ningún partido integrante, ni de otro partido parlamentario, ni dirigentes sindicales y un puñado apenas de estudiantes de la FEUU. Seguramente los sionistas cómplices del genocidio y la embajada israelí de los asesinos aquí en Montevideo, festejaron. No tiene nada que ver con lo que sucede en otras ciudades del mundo. Inclusive en Israel y en EE.UU.

Tenemos antecedentes totalmente diferentes. Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, con la derrota de los alemanes, de los nazis, porque esas categorías no pueden separarse, hubo en Montevideo en el año 1945 una enorme manifestación.

En esa manifestación se atacaron y se incendiaron dos comercios céntricos, La Sibarita y la Confitería EL Oro del Rhin, además la gente enardecida asaltó el local del diario El Dia en 18 de Julio y Yaguarón porque habían izado las banderas de todos los países aliados, menos la Unión Soviética y obligaron a colocarla. La absoluta mayoría de los manifestantes no eran de izquierda, eran ciudadanos, seguramente batllistas. La izquierda era muy pequeña. Eran uruguayos de ley y ante las atrocidades de los nazis y sobre todo los campos de concentración recién conocidos se sublevaron. Nosotros vemos el campo de concentración gigante de Gaza todos los días y al asesino de Natanyahu hablando y mintiendo cotidianamente.

Aquí no sucede absolutamente nada, en un país donde la izquierda se supone que sacó más de un millón de votos, donde hay manifestaciones por comportamientos fascistas de la dictadura de cientos de miles de personas todos los años, para reclamar Verdad y Justicia. ¿Y en Gaza, en toda la región donde los fascistas israelíes atacan a y matan a mansalva?

Ya nadie con dos dedos de frente y un poco de información, no de prensa de izquierda - cada día menos - sabe que Hamas fue formada y financiada por el gobierno de Tel Aviv en particular por Netanyanhu desde hace muchos años. Lo declaró en el Parlamento de Tel Aviv.

Sabe perfectamente, porque lo han dicho los grandes diarios norteamericanos, británicos, franceses y cadenas de tv, que el ataque terrorista a Israel durando casi 24 horas del 7 de octubre del 2023, no solo fue permitido, conocido, sino que uno de los ejércitos y de los servicios mejor preparados y armados del mundo demoraron casi 24 horas en socorrer a los miles de habitantes de la región. Fue frio y premeditado.

Es exactamente como el asalto  y el incendio al Parlamento Alemán organizado por los nazis, del año 1933 que le permitió a Hitler tomar plenamente el poder.

Gaza es igual que el pequeño territorio de Danzing que los alemanes atacaron el 1 de setiembre del 1939 y luego ocuparon casi toda Europa.

Así que los pobres y degradados argumentos utilizados en todo el mundo por los judíos cómplices con el asesinato masivo y la transformación de Gaza en un gigantesco campo de concentración, son una enorme mentira.

¿Alguien puede creer que, en 22 meses de ataque ininterrumpido de las tropas israelíes a Gaza, de la destrucción de hospitales, escuelas, mezquitas y todas las casas habitación, no hayan encontrado más que un solo rehén de los capturados por Hamas? Los único tres israelíes que se estaban rindiendo con una bandera blanca fueron fusilados por los hebreos.  Todos datos oficiales.

Y todavía los asesinos y sus cómplices en el mundo discuten de las cifras, si fueron 50.000 mil o más de 70.000 mil muertos o si como dice las Naciones Unidas, si se agrega el hambre y la falta de atención médica superan las 150,000 personas, muchos de ellos incluso no son de Gaza, ni siquiera palestinos. ¿Cuánto vamos a esperar para que en Uruguay haya una respuesta adecuada?

Los ciudadanos comunes, los trabajadores, los estudiantes, los intelectuales, los jóvenes, las mujeres y naturalmente sus organizaciones. No hace falta ser de izquierda, pero si nos proclamamos de izquierda, somos una negación deplorable. Y quédense tranquilos a mirar los pocos informativos de  nuestra televisión infame sobre una masacre masiva y diaria.

Han violado todas absolutamente todas las leyes internacionales, los derechos humanos, han fusilado niños y mujeres reclamando comida. No les falta nada. El gobierno de Israel logró transformar a sus fuerzas armadas en unos cobardes asesinos capaces de cualquier cosa.

Y han logrado que la mayoría de la población de Israel y de los judíos residentes en diversos países se transformen en cómplices del genocidio.

¿Y nosotros que somos? Naturalmente la izquierda, que duerme su tranquila siesta, a todos los niveles, sino los uruguayos democráticos, los que defendemos el derecho a la vida, el derecho humano básico.

El jueves próximo voy a publicar una columna con más elementos, pero hoy no resisto más, no es ninguna impaciencia, es el horror, es el asco de sentirme cómplice de esos cobardes y de compartir con ellos su complicidad en mi propia ciudad.

No es solo por los palestinos es por nuestra dignidad.

 

Esteban Valenti
2025-07-29T11:25:00

Esteban Valenti.

Trabajador del vidrio, cooperativista, militante político, periodista, escritor, director de Bitácora (www.bitacora.com.uy) y Uypress (www.uypress.net), columnista en el portal de información Meer (www.meer.com/es) y de Other News (www.other-news.info/noticias).