¿Y después qué? Danilo Arbilla

31.10.2025

Veamos, tenemos dos interpelaciones prometidas: una a ministra de Salud en Diputados y otra a ministra de Defensa en el Senado. Redondeando, una por el tema del pluriempleo a alto nivel, lo que, cualquiera sea su resultado, será un tema de entre casa y la otra que tiene que ver con lanchas patrulleras, soberanía nacional, narcotráfico y la pesca de nuestros peces.

Todo eso junto, que esa sí trasciende fronteras y se corre riesgo que de una forma u otra, ya sea en pérdida de soberanía y peces o en perdida de dinero si se pierden juicios, nos puede salir caro, a todos. Respecto a este último tema se percibe que ya la conferencia de prensa con el presidente flanqueado, no jugo a favor de su imagen.

Con los llamados a sala pienso que no va a pasar nada: en el Senado los votos están y en diputados los que faltan se consiguen, -a la orden-, por lo que  ambas cámaras se sentirán satisfechas por los informes de las respectivas ministras y aprobarán sus actuaciones. De esto y no mucho más es de lo que se enterará la gente. A no engañarse: en lo que hace a transparencia, a vigilancia popular, al derecho del pueblo a saber lo que pasa, las interpelaciones con resultados casi cantados poco aportan.

 La oposición se sentirá satisfecha: se ha cumplido. El gobierno también, otra mojada de oreja más y, eso sí, sin renunciar a la mejor disposición al diálogo, favorecido en casos por contribuciones "constructivas y esclarecedoras" de enfrente, que siempre aparecen. El "arte de la política" sirve tanto para un lavado como para un fregado.

La que sale desmerecida es la Constitución. Aquello del "freno" que hablaba el Prócer como que ha perdido vigencia.  Los informes jurídicos, los de la Universidad, de los "bufetes", o hasta de organismos de menor jerarquía creado para darnos garantías, importan más que lo que la Constitución dice claramente. Como que con lo de las "dos bibliotecas" se les va la mano, son demasiadas; relajo pero con orden, ché.

Lo de ASSE parece clarísimo: " ni directa ni indirectamente", dice el Art. 200 de las Constitución y el Art. 9 de la Ley de creación del servicio. Que otra cosa leyó el Poder Ejecutivo. Qué otra cosa puede leer la Jutep, -salvo que lo haga en función de cuota política, no olvidar lo que pasó en periodo anterior- a cuyo informe están a la espera el presidente y la ministra de Salud.

 Será que los constituyentes fueron parcos y a lo de directo e indirecto tenían que haber añadido "ni por asomo, ni de cerca, ni cosa que se le parezca o despida  algún olor feo", para no tener que recurrir a tantas bibliotecas.

 Da la sensación que el presidente de ASSE, dada su reconocida trayectoria, podría  ocuparse de esa tarea sin necesidad de abandonar todas sus otras actividades, -que él lo podría hacer "de taquito" o desde el asiento de atrás del auto (¿el chofer quién lo paga?)-,  pero no puede ni debe ser así por aquello -y otra vez el Prócer- de que "es muy veleidosa la voluntad de los hombres...".

Debería renunciar: a una cosa o a la otra. No es fácil dado lo que se dice percibe por un  lado o por el otro. La oposición por su lado no debería quedarse con la interpelación. Eso sí, hay que trabajar.

Y en cuanto a lo de las lanchas eso puede que en algún momento se nos escape de las manos, esto es, al Uruguay; tiene muchas derivaciones y si "la jugada" sale mal, el costo los deberemos pagar todos y todas y no es justo.

 

Danilo Arbilla

Columnistas
2025-10-31T20:44:00

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