Primer apunte sobre el empujador “Ky chororo”

Carlos Visca

30.11.2015

El proyecto del tren de barcazas y empujador-remolcador, surge después de culminar la construcción de la barcaza para BOTNIA.

La idea de este proyecto fue presentada al Presidente de Ancap en una conversación mantenida  por mi y dos compañeros más en aquel momento sobre las bondades de este sistema de transporte. La respuesta por parte de sus funcionarios fue que no era posible usar este medio en el Río de la Plata, aunque se ve la operativa paraguaya ingresar al puerto de Montevideo con medios similares al propuesto,  datos obtenidos telefónicamente en el 2008  ANCAP- Paysandú (desde junio 2007 a junio 2008 se realizaron 37 operaciones de descarga en la boya 28 desde buques y solamente 14 fueron del buque ANCAP IX y 8 trenes de barcazas con un total de 26 de ellas).

Paralelamente a esta opinión Ancap estaba estudiando (gestionando) la compra de un petrolero a medio terminar en Argentina, por sus características podría operar menos que el  petrolero Ancap IX en la hidro vía. 

Ancap aprueba el proyecto para la construcción sobre la propuesta de la construcción del tren de barcazas y el empujador-remolcador.

El Ministerio de Defensa Nacional (MDN) a través de la Armada y esta con el Servicio de Construcciones y Reparaciones de la Armada (SCRA) se autoriza al jefe del astillero firma el contrato para la construcción de estos medios de transporte de combustible, luego de lo cual surgen algunas interrogantes, ¿por que se designo  a los ing. Argentinos (R.N. Consultores) sin haber realizado un llamado público para la elaboración de la Ingeniería Básica del proyecto. No se tuvo en cuenta a la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República (UdelaR), a la Asociación de Ingenieros Navales y empresas nacionales. ¿Por qué se optó por RINA (registro italiano clasificación y certificación de buques), teniendo por ejemplo el petrolero ANCAP IX en el registro donde fue construido?

El proyecto se lleva adelante con la participación de una empresa privada que tenia la capacidad de intervenir en la ingeniería de detalle y parte de la conducción del mismo. En esto aparecen los problemas: resolver las incompatibilidades de los sistemas públicos -privados tanto en lo empresarial como a nivel de los trabajadores aunque con el mismo salario.

Esta empresa no participa hasta el final del proyecto, habiendo colmado sus expectativas económicas y aprovechado cláusulas contractuales se retiran quedando quedando el SCRA  a cargo de la finalización.

También se debe tener en cuenta la participación de pequeñas empresas y técnicos privados que habían aportado a estas construcciones.

Si vemos la organización inicial para la tarea, la infraestructura que ampliar y la evolución de esta, más la sucesión de los mandos, quien firma se hace cargo asciende, pide la baja y se la dan.     

A este nivel solamente por incapacidad se justifican los relevos, estamos hablando de personal militar.

Al cambiar la conducción del proyecto (por personal que no esta interiorizado  o capacitado en el tema mas otros cambios), vuelta a empezar y lo que le da continuidad es la parte privada en la parte operativa.

Por la otra parte Ancap que al empezar había pedido un espacio para tener una oficina para instrumentar el seguimiento de la construcción, este fue preparado  pero nunca  ocupado, el control por parte del armador fue esporádico y poco documentado (actas y algunas no se quisieron firmar).

Los cambios sobre el proyecto inicial propuesto influyen sobre los plazos de entrega, el sistema de compras del estado no responde con la celeridad necesaria cuando el insumo hay que importarlo y debe ser tal o cual que propone el armador. (lo que significó atraso en la entrega y tener que contratar 'empujadores' par operar las barcazas).

Al no participar la Facultad de Ingeniería en el proyecto, esta no puede apreciar en el sitio la realidad para preparar una curricula acorde a las necesidades de la industria.

La no  identificación  de la importancia del proyecto, no permitió el trabajo mancomunado del  público con el privado ya que el trabajador público no veía con buenos ojos al trabajador privado  en relación con la productividad por un lado y por el otro, haga o no haga cobra igual y esto es consecuencia de no existir una conducción correcta de los recursos humanos con  las herramientas legales, por ejemplo el TOFUP y una plantilla laboral acorde a la producción (planteada en 2006).

Para sacar buenas conclusiones del proyecto es  necesario analizarlo desde el principio y no  quedarnos en el  hecho puntual teniendo en cuenta los contratos de 'empujadores', el resto de la flota, boya petrolera de José Ignacio y los últimos acontecimientos de Paysandú y los recursos humanos.

Carlos Visca

Columnistas
2015-11-30T15:51:00

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