Más vale viejo conocido…(II)

Carlos Vivas; Homero Bagnulo

07.08.2018

Una reciente encuesta (julio 2017), realizada por la empresa CIFRA para el Colegio Médico del Uruguay mostró que el 68% de los uruguayos encuestados se atiende con el mismo médico y que cuando cambia de médico  esto  se debe  primordialmente, a que no consigue cita con su médico tratante.

 

Por tanto, no le es atribuible esta opción, ya que, preferiría continuar tratándose con su médico de elección. Este porcentaje se eleva al 86% cuando se analiza el subgrupo de pacientes de más de 60 años. También  el subgrupo de las mujeres muestra una mayor continuidad que  el promedio de la muestra (78%).  Merece destacarse que los mayores de 60 años que mantienen una relación continua con su médico declaran que dicha relación es buena o muy buena en un muy elevado porcentaje (94%).

Estos datos debemos analizarlos teniendo muy en cuenta los aportes de una reciente revisión del British Medical Journal (28 de junio de 2018)  cuyos autores son D. Pereira Gray, K Sidaway-Lee, y otros. Ya su título es muy sugestivo:"Continuidad del cuidado con médicos - ¿Un asunto de vida y muerte?".

Dichos autores revisan los artículos publicados en inglés en los últimos 21 años cuyos diseños fueron estudios caso -control, estudios de cohorte y estudios controlados. Incluyeron en su análisis 22 estudios de 9 países diferentes (6 de Canadá, 5 de EE.UU, 3 de  Inglaterra, 2 de Francia, 2 de Taiwán y 1  cada uno de Croacia, Holanda ,Israel y Corea del Sur ). Nueve de esos estudios  investigaron la continuidad de la atención con un médico de familia, tres con especialistas únicamente y diez incluyeron médicos  de  todo tipo. El tiempo  medio de la continuidad  de la relación fue de 2 años. En 91% de estos estudios reportaron la mortalidad. Los resultados son realmente impactantes ya que el 82% de las publicaciones analizadas mostraron que la  mayor continuidad del cuidado se asoció estadísticamente  en forma significativa con una menor mortalidad.

Si bien el tamaño del efecto encontrado no fue muy amplio,  el mismo está en el rango del efecto que se obtiene con muchos tratamientos.  Recuerdan los autores que efectos amplios y repetibles en mortalidad son infrecuentemente  hallados  en la medicina.

Destacan también como fortalezas: 1- El elevado número de pacientes que integran varias de las cohortes publicadas;  2- Los estudios provienen de diferentes países con variados sistemas sanitarios y culturas diversas; 3- La continuidad del cuidado fue importante tanto para la atención brindada por médicos de familias como por especialistas. O sea que el efecto no estuvo limitado a una rama de la medicina o a un  sistema sanitario determinado.

Se ha demostrado en los últimos años en forma fehaciente que la continuidad del cuidado es uno de los factores más requeridos por los pacientes y sus familias y se asocia con beneficios múltiples. Los mecanismos que posiblemente estén en la base de estos mejores resultados pueden vincularse al desarrollo de estrategias de prevención  mantenidas en el tiempo y también a la obtención de mejores acuerdos en cuanto a los tratamientos y a una mayor adhesión de los pacientes a dichos tratamientos vinculada a la continuidad de la asistencia con un mismo médico.

Tal como se  describe en la encuesta  realizada en nuestro país la continuidad en la relación se asocia a una percepción por parte de los pacientes que su médico es más receptivo a sus planteos y  reconoce mejor sus necesidades adaptando así los tratamientos propuestos. Los autores,  en un trabajo anterior,  han sugerido que:" Los médicos tienden a sobrestimar su efectividad cuando son consultados por pacientes que no conocen y subestiman su efectividad cuando son consultados por pacientes que ellos conocen".

Los contactos repetidos en la relación  médico-paciente implican un mejor conocimiento de las necesidades y las prioridades que  se presentan en la relación y debiera considerarse una medida de la confiabilidad en esta relación. A veces estas relaciones se mantienen durante décadas, lo que conlleva un conocimiento acumulado mutuo que es muy importante para la provisión de consejos médicos adecuados a cada paciente. Se obtiene así una mayor satisfacción bilateral  en la relación,  una mejor promoción sanitaria, una mayor adhesión a la medicación y e incluso se reducen las internaciones hospitalarias.  Por tanto parece lógico que esto se extienda a los rangos de mortalidad y se aplique tanto, a especialidades  médicas, quirúrgicas y preponderantemente a la medicina familiar.

No podemos menos que aplaudir el parágrafo de cierre de este artículo: " Por 200 años los avances médicos han sido mayormente técnicos e impersonales, lo que ha reducido la atención al lado humano de la medicina. Esta revisión sistemática revela que más allá de los numerosos avances técnicos la continuidad del cuidado es un hecho destacado de la práctica médica y un asunto potencial de vida y muerte".

Homero Bagnulo y Carlos Vivas
2018-08-07T07:24:00

Dres. Homero Bagnulo; Carlos Vivas