Tecnología, ultra millonarios y fascistas

Esteban Valenti

16.01.2025

Un proceso que se ha acentuado, es la directa participación de los ultramagnates de las nuevas tecnologías en la batalla a favor de la derecha extrema, del neofascismo. No es solo un tema ideológico tiene profundas razones económicas y sociales.

El apoyo de Elon Musk a Donald Trump es evidente y estridente, se manifestó en toda la campaña electoral, y mientras en la anterior campaña Trump repudió la red Twitter en esta ocasión la red X adquirida por el magnate sudafricano-norteamericano fue uno de sus principales vías de comunicación y fabricación de diversas realidades para consumo de los electores. Hablemos claro, para organizar gigantescas campañas de mentiras y odio.

Mark Zuckerberg intervino en una entrevista de casi tres horas en el podcast de Joe Rogan.

El fundador habló sobre la censura en redes sociales, sobre la competencia y sobre las nuevas masculinidades que necesita el ámbito empresarial.

Mark Zuckerberg en una reciente entrevista con Joe Rogan, la primera luego del anuncio del propietario de Meta de que relajará el sistema de moderación de contenidos de sus redes sociales en EEUU.

Meta Platforms, Inc. (anteriormente conocido como Facebook, Inc.), cuyo nombre comercial es Meta, es un conglomerado estadounidense de tecnología y redes sociales con sede en California. Es la empresa matriz de Facebook, Instagram, WhatsApp, Messenger Live y Threads, también ha adquirido Oculus VR, Giphy y Mapillary, y tiene una participación del 9,9 % en Jio Platforms. Su valor total se estima en 150 mil millones de dólares.

En sus declaraciones, Mark Zuckerberg habló sobre supuestas presiones de la Casa Blanca para incrementar la censura de contenidos, contra las políticas de privacidad de Apple, y le sobró tiempo para asegurar que las empresas necesitan más "energía masculina".

El millonario aseguró que la idea original del sistema de moderación era sacar de circulación mentiras evidentes "que la tierra es plana y cosas así". Tras el primer mandato de Trump, "comenzamos a enfrentar una presión institucional masiva para censurar contenido en base a la ideología. El sistema se desvió. Algunas de esas personas cuyo trabajo es hacer fact-checking se centraron en la verificación de contenido político. Por eso, mucha gente pensó que los verificadores estaban demasiado sesgados, no necesariamente en lo que resolvían, sino por el tipo de cosas que elegían verificar", señaló el millonario.

El millonario reconoció que todo comenzó a tensarse durante la pandemia -momento en el Trump todavía ocupaba el despacho oval, como recuerdan en The Verge-, pero se hizo más intenso tras su mandato, pese a que Meta bloqueó las cuentas de Trump en sus redes sociales al final de su mandato.

Elon Musk, el hombre más rico del mundo, con una fortuna estimada en 482.000 millones de dólares, dio directamente un giro hacia el neofascismno, y anunció su apoyo directo a la creación de una central internacional de ultraderecha.

El giro de Musk no sorprende, tiene antecedentes y fundadas razones económicas. Todo empezó cuando los trabajadores de Tesla intentaron sindicarse en 2017. Musk se opuso ferozmente al intento de sindicalización, y ganó. Hoy, Tesla es el único fabricante de automóviles no sindicalizado en Estados Unidos.

Musk se ganó la reputación de ser un temible destructor de sindicatos. Recientemente, la UAW presentó cargos laborales federales contra él por sus comentarios antisindicales. La CSI señaló a Tesla como una de las seis empresas «que se benefician... al seguir violando los derechos sindicales y humanos».

Naturalmente, sus batallas con los sindicatos le llevaron a los brazos de la derecha. A medida que se acercaba a figuras de la derecha en Estados Unidos y en todo el mundo, se convencía más de sus argumentos sobre la inmigración. ¿Por qué?

Todos los derechistas inteligentes del mundo saben que la economía neoliberal no gana elecciones. Su objetivo final es el bienestar corporativo para las grandes empresas, los recortes fiscales para los ricos y el aplastamiento de sindicalistas y manifestantes. Pero no pueden decirlo en voz alta.

La única forma que tiene la derecha de ganar el poder del Estado es reconocer el profundo sufrimiento que han creado décadas de desigualdad creciente, y culpar de ese sufrimiento a algún «otro»: inmigrantes, delincuentes, desviados, etcétera. Esa «otredad» es, por supuesto, el requisito previo para el fascismo.

En resumen, Musk odia a los sindicatos. Quiere que el gobierno los aplaste. Los políticos que dicen «aplastar a los sindicatos» no ganan elecciones. Pero los políticos que dicen «deportar a los inmigrantes» sí. Una vez que han ganado el poder, pueden enfrentarse a los trabajadores, como está haciendo ahora Trump.

Curiosamente, este vínculo entre un gran fabricante de automóviles estadounidense y el fascismo no es único. Henry Ford era un ferviente antisemita y uno de los más despiadados y hábiles destructores de sindicatos del siglo XX.

En 1938, Ford aceptó la Gran Cruz del Águila Alemana, el más alto honor del régimen nazi para extranjeros. Hitler incluso elogió a Ford en Mein Kampf.

Ford también era conocida por contratar matones para golpear a los trabajadores en huelga. En la Batalla del Paso Elevado, el ejército privado de Ford atacó a los trabajadores de la UAW que intentaban repartir panfletos fuera de la fábrica, hiriendo a 16 de ellos.

Los destructores de sindicatos como Ford y Musk saben que no pueden confiar en la fuerza bruta todo el tiempo. Necesitan ganarse el consentimiento popular para su política, y la única forma de hacerlo es victimizar con saña a las minorías e introducir la política neoliberal por la puerta de atrás.

Pero no se trata sólo de Musk o Ford. Los vínculos entre la represión sindical y el fascismo son profundos. Mientras que mucha gente se ha sorprendido por el descenso de Musk de "progresista" a fanático de extrema derecha, estaba claro que terminaría aquí en el momento en que comenzó una guerra contra sus sindicatos.

El eje entre los multimillonarios y la ultraderecha, se hace cada día más evidente.

 

Esteban Valenti
2025-01-16T07:01:00

Esteban Valenti.

Trabajador del vidrio, cooperativista, militante político, periodista, escritor, director de Bitácora (www.bitacora.com.uy) y Uypress (www.uypress.net), columnista en el portal de información Meer (www.meer.com/es) y de Other News (www.other-news.info/noticias).