Inquisición en el Movimiento Uruguay Soberano. Marcelo Marchese
01.09.2025
"Quien luche con monstruos cuide de no convertirse en monstruo" Nietzsche De esta manera Nietzsche, que como puede verse, más que filósofo era un poeta, nos muestra cómo cada cosa tiene un poder magnético, y si uno no logra ejercer su poder magnético sobre los monstruos, los monstruos ejercerán su poder magnético sobre uno.
El lector se habrá preguntado alguna vez por qué los movimientos religiosos, artísticos y políticos que nacieron para transformar el mundo, no lograron su objetivo y fueron prostituidos al grado de convertirse en sus contrarios. En la lucha con monstruos, se convirtieron en monstruos.
El gran problema para transformar el mundo es que uno está en el mundo, por lo que, si no sabe discriminar dónde empieza el sistema del mundo y dónde empieza uno, fracasará.
Vivimos bajo la tiranía del pensamiento único, el pensamiento único del monstruo, ya que el monstruo es nosotros, y nosotros tememos la libertad del que piensa sin miedo, pues tememos cambiar y pensamos que en el cambio llegaremos al no ser. Lo que Es teme al no ser, y por eso tememos a la muerte y la locura.
Si queremos cambiar la vida, la primera condición es declarar una libertad irrestricta para las ideas. El mundo de las ideas es muy frágil, y en ocasiones, se precisan siglos para que nazca una flor rara, una flor rara y preciosa que acaso la humanidad fue gestando por siglos.
Ocurre entonces que quien lucha contra la verdad única termina imponiendo la verdad única, y así tenemos cómo, pocos años después de la muerte de Cristo, la secta preponderante eliminó a las otras sectas y creó La Iglesia, el surrealismo terminó erigiendo tribunales a los surrealistas que escapaban de la línea oficial y el stalinismo fusiló a quienes condujeron la Revolución Rusa.
Estos tres casos llevaron unos cuantos años, sobre todo en el cristianismo, mas al Movimiento Uruguay Soberano le alcanzaron seis años para caer en el pantano del pensamiento único.
LA DEMONIZACIÓN
El pensamiento único precisa crear demonios, ya que el rechazo al demonio cohesiona: los argumentos del demonio desestabilizan al pensamiento único, así que se erige una narrativa según la cuál el demonio es tan inteligente que se apodera de la Comisión del Canal del MUS y la hace danzar a su música.
Al pie de esta nota, tendrá el lector un link a youtube donde verá al demonio Satán argumentar contra la Ley de eutanasia por un camino diferente al que pretende imponer el líder supremo que, a diferencia de Satán, es un buen padre, comprensivo y sobre todo, democrático.
En realidad, el líder supremo acusa a Satán de aquello que el líder supremo hace: copar la estructura del MUS para maniobrar, mentir y no permitir que Satán se exprese hacia adentro y hacia afuera.
¿Por qué el líder supremo perdió la chaveta?
Porque no puede tolerar los argumentos de Satán, y más que nada, porque no quiere dejarse convencer por Satán, que no presenta a la ley de eutanasia por el lado exclusivo y cómodo de la culpa ajena, sino como un problema propio.
La actividad política tradicional fracasa porque no involucra al hombre. En el mejor de los casos, presenta su discurso en un plano racional, pero no son las razones las que mueven al hombre, sino profundas fuerzas que mueven a su vez a las razones, ya que el pensamiento es esclavo de la pasión.
Lo que lleva a la gente a aprobar la eutanasia es su terror a la muerte, que no es otra cosa que el terror a la vida, ya que la vida y la muerte son dos facetas del mismo asunto. El terror a la vida es el terror al hombre, ya que vivimos la más profunda depresión de las fuerzas anímicas del hombre.
Esta depresión obedece a causas históricas, pero sobre esas causas operan fuerzas activas que pretenden incidir en el curso de la historia para acelerarla, y esas fuerzas activas crean y financian la narrativa del feminismo y el calentamiento global así como crean pandemias. El objetivo es presentar al hombre como un virus letal para el hombre y el planeta, y así prepararlo para la nueva era.
Como estas fuerzas activas se erigieron a sí mismas en dioses de la humanidad, pretenden perfeccionar a la humanidad, llevarla a un nuevo nivel evolutivo: una humanidad sin animalidad. Es el carácter animal del hombre lo que los inquieta y lo que debe ser anulado, pero como no puede ser anulado, será suprimido en su aspecto vital: la sexualidad humana, esto es, su increíble capacidad de amar.
El lector objetará que sin embargo hay guerras, genocidios y torturas. Si la energía del amor no se conduce, vuelve convertida en su contrario, y si los hombres no se unen por las buenas, harán esa unión por las malas y así tendremos las guerras, así como si el cuerpo deseado no puede ser tocado, será desgarrado en la tortura.
Pasé mi infancia y adolescencia en un liceo de curas. Como había leído la Biblia, tenía argumentos para objetar a este cura y a aquel otro. Decidieron que no podía objetarles. Así comencé, de niño, a vivir bajo las amenazas de esa vieja inútil y alcahueta llamada Censura, que luego se manifestó en el gremio, el partido, el sindicato, los grandes medios de comunicación y el movimiento que contribuí a crear.
El MUS se ha convertido en un partido más. No es un movimiento, porque no permite la manifestación de ideas que un movimiento implica; no es democrático, ya que las decisiones se toman a puertas cerradas en un chat donde se anulan comentarios y se expulsa gente; y no es horizontal, ya que se copa la estructura para impedir que se expresen otras opiniones.
Prueba irrefutable de esto es que el video que armó el grupo del canal no salió por las redes del MUS y cuando se presentó el programa que haría en dos días Satán, el líder supremo cambió las reglas de juego acusando al grupo del canal de querer usar el MUS para sus propósitos oscuros. En realidad, se está usando del MUS para los propósitos exclusivos del líder supremo, pues, siguiendo una antigua regla, lo que el denunciante proyecta en el otro, no habla del otro sino de sí mismo.
Algunas personas han manifestado su desilusión por este accionar. Antes, habían sido desilusionadas por otras personas y otras estructuras. El engaño requiere de uno que quiera engañar y de otro que quiera ser engañado. Se desilusiona aquel que ha construido ilusiones, pero no se trata de construir ilusiones sino de ver las cosas tal como son.
¿Por qué en los partidos y movimientos medran unos sujetos de pobre vida sentimental? Llenan con la actividad política un vacío que no pueden llenar por sí mismos y precisan del amor de un padre sustituto. Toda estructura tiende a replicar la del ejército o la Iglesia. En el caso de los partidos que pretenden cambiar el mundo, replican la estructura de la Iglesia, lo que anula todo pensamiento crítico, pues para ascender en la estructura, se deben seguir las ideas que establece la estructura, y para ganarse el amor de los hermanos, se busca la aprobación del padre sustituto.
Nada nuevo hay bajo el sol. Por eso las estructuras siempre niegan la manifestación de ideas, la lucha de ideas y a la postre, las ideas. Las sectas se crean tras la muerte de los profetas para negar a los profetas.
No existe nada en el mundo que esté por fuera de nuestra mente. Es nuestra mente la que crea el mundo. Es como si todos estuviéramos jugando al tiro al blanco. El blanco permanece aparentemente impasible, pero cada uno de nosotros ve un blanco diferente.
Quienes queremos cambiar el mundo venimos perdiendo desde hace siglos. La ley de eutanasia no busca reducir la población mundial. Busca que la ciencia desplace al hombre. Si queremos revertir este proceso, debemos confiar en otro mundo que no es otro que el mundo que llevamos dentro. El Microcosmos se encuentra inserto en el Macrocosmos. Las cosas no se miden por su número, sino por su intensidad. En este mundo, el Microcosmos es tan hermoso como el Macrocosmos.
https://www.youtube.com/watch?v=M8oQGivjpxc&t=115s
Marcelo Marchese
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias