En una sociedad donde rige la competencia, el debate siempre tiende a ser confrontativo
Jorge Aniceto Molinari
16.02.2017
Son reglas de juego impuestas por una base material que no podemos desconocer.- Ahora esas reglas tienen un marco muy cambiante de acuerdo al carácter de los contendientes y a las propias reglas generales admitidas o no por todos.
Cuando el sistema logra imponer determinadas creencias, la lucha contra ellas tiene vicisitudes variopintas, recordemos lo que nos dice la historia sobre comprender que es la tierra la que gira en torno al sol.-
Cuantas veces se nos ha dicho que la base del stalinismo fue en definitiva el marxismo-leninismo (que trataron de convertirlo en una categoría propia e indivisible del propio stalinismo), o que la burocracia "batllista" en el Uruguay fue producto de la política estatista de José Batlle y Ordoñez, no teniendo en cuenta, ni respetando las ideas en sus contenidos básicos, de los que le dieron formas a ellas. Algo así como con Cristo y sus iglesias.
Batlle y Ordoñez no solo que no era estatista, las medidas que adoptó eran prácticamente las únicas posibles para sacar al Uruguay de su atraso y ponerlo en el camino del desarrollo moderno, y a su vez trató de tomar medidas contra la burocracia, en las que a la larga en la historia fue derrotado por sus propios mentores. Fue claro cuando vaticinó a la muerte de Lenin, cual eran los riesgos de un camino estatista en la naciente Rusia soviética. Los medios técnicos no eran los que hoy disponemos, y difícilmente hubiera podido conocer Batlle las características del debate en el seno de la revolución, entre "el comunismo de guerra", "el socialismo a paso de tortuga" y el planteo de Lenin, la NEP (nueva economía política).
El debate tiene entonces estas características y nadie puede sentirse libre de pecados, lo que no quiere decir que admitamos sin señalar hechos de deformaciones como las que señala Chomsky en EE.UU. o Alberto Grille (ver Caras y Caretas) sobre los hechos expuestos por "El País" de Montevideo, y sus falacias informativas. Además los medios técnicos hoy todo lo potencian pero a la vez permiten un grado de mayor permeabilidad si hay claridad ideológica, nosotros somos de los que pensamos que sobre una base material correcta la fuerza de las ideas en última instancia y no sin sufrir contratiempos, se impone.
Por lo tanto y para ilustrar como se viene dando el debate abajo, entre la gente, reproduciremos un intercambio dando solo nombres obvios y de conocimiento público, pero no dando los particulares que intervienen en el debate puntual y corriente, como lo hacen millones de seres humanos en el mundo.
Vamos entonces a un intercambio sobre el que mantengo textual y conservando sus formas y hasta los errores ortográficos en tanto ellos son expresión de bronca:
Me envían este correo:
"IMPERDIBLE!!!
No hay que sacarle ni una coma.
Clarito!!!
si se esta preparando para candidato que no sea como todos del pasado (se refiere al video que va al final), de pronto "arriesgaría mi voto"(mi autoridad emana de vosotros y ella cesa ante vuestra presencia soberana) con modificaciones o no ,pero si las impusieran las del 1813 no quedaría ninguno de esta lacra que tenemos. como padre de un varón preparado para trabajar en lechería ,apicultura huerta, en 20 htas de tirra con índice de coneat 100, me retuerce la bronca de que tubo que hirce al estrangero, a poder vivir algo mejor, por esta casta política de mierda que tenemos arriba asta cuando...a veces pienso que lo tenemos bien merecido, por nabos y de andar mendigando puestitos de mierda"
Agrega además un video con la intervención del Ing. Agrónomo Luis Romero Álvarez que hace un centro en defender la política de Trump y de argumentar que el mundo financiero se le opone.
Mi respuesta:
Lo de Romero Álvarez no resiste el más elemental de los razonamientos.
Trump sin el apoyo de un sector muy poderoso del mundo financiero, jamás hubiera llegado ni siquiera a la candidatura.
Además el es parte de eso, y su poder está totalmente subordinado a lo que los complejos empresariales multinacionales decidan en el mundo. EE.UU. es un país fuertemente endeudado, que ha perdido su soberanía.- De un Estado imperialista ha pasado a ser un Estado gendarme, que ya no puede aportar nada para su gente más humilde, como además lo demuestran la falta de previsión para abordar fenómenos naturales como los que hoy se están presentado.
Su expresión no es más que una de las confrontaciones que existen a ese nivel.
Ahora pensar en un país autosuficiente y rodeado de muros, además de ser una falacia (los amigos de Trump tienen intereses afuera e intereses adentro) es una demostración contundente de lo que ya decía Einstein: la estupidez humana no tiene límites.
El amigo replica:
estimado Molinari: lo de Trump me importa un bledo, en lo que si estoy en sumo acuerdo es con respeto a nuestro pais NADIES EN ESTE PLANETA ES IMPRESINDIBLE MANEJANDO LAS COSA DEL PUEBLO CON SENTIDO COMUN QUE ES LO QUE POR DESGRACIA SE HA PERDIDO CADA VEZ MAS
UN ABRAZO
Mi nueva respuesta:
El sentido común es el menos común de los sentidos.
Nosotros, nuestra sociedad ha sido beneficiaria de la guerra en otras zonas del planeta, pero eso se está terminando. Lo que dice Romero Álvarez sobre Trump es un delirio y si en el Uruguay se promoviera lo mismo, sería una tragedia.
Para desarrollar el trabajo en el mundo es necesario terminar con las distintas medidas monetarias, tiene que haber una moneda única y universal que termine con la joda de los distintos tipos de cambio. A la gente eso no le sirve.
Los impuestos no pueden ser al consumo, ni al trabajo, ni a las pensiones, debe ser al giro del dinero, y no puede haber ninguna operación válida si no está debidamente registrada en el organismo que la sociedad determine. Hay que dar muerte a los paraísos fiscales, hay que terminar con la guerra.- Esta forma impositiva debe financiar obras universales, que satisfagan las necesidades de todos los seres humanos.
No me importa si una persona es o no rica, todos debemos trabajar en algo, ahora el movimiento del dinero debe ser útil a la sociedad, todo lo contrario de lo que ocurre ahora.
Es un delirio defender el trabajo de nuestra gente frente al trabajo de otra gente, como dice Trump, y también lamentablemente nuestro PIT-CNT(Central sindical uruguaya).
Su repuesta:
TOTALMENTE DE ACUERDO....................
UN ABRAZO
Mi reflexión final por ahora:
Mientras el debate está en el terreno confrontativo a que nos lleva el modo de producción predominante, no tiene salida.
Cuando vamos a la raíz del problema entonces surge el acuerdo. Ahora porque ir a la raíz de los problemas cuesta tanto y prima el debate de modelo contra modelo, o el de la rrrrrrevolución como utopía opuesto a las supuestas reformas, o el de candidatear gente antes de ir al mundo de las ideas. ¿Por qué lo utópico sigue predominante sobre el intento del análisis científico? No es casualidad que en este ejemplo que se trae, el expositor del video no hable ni de impuestos ni de la moneda, ni del cambio en el carácter del trabajo. Tampoco de la necesidad de imponer la paz, cuando la industria de guerra significa el desahogo empresarial de los principales Estados que intervienen en ella y por supuesto que EE.UU. de Trump.
¿Cuál es el desafío?: Ver el mundo atendiendo al interés de todos, ante la vigencia de un sistema que necesita que su predominancia muera en paz, que ha educado para la competencia, cuando se necesita la cooperación que integre a todos los que estén dispuestos a ella.
Crear hoy trabajo verdadero para atender las necesidades de la gente al capitalismo ya no le es rentable y para los Estados inalcanzable con sus herramientas burocráticas entre las que están (ellos creen que es así y en la verdad de la economía tampoco lo es) el manejo de la moneda y de los impuestos. Tampoco Trump escapa a esto.
Las respuestas también forman parte del debate. Continuaremos.
Jorge Aniceto Molinari
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias