La cumbre de la OTAN en La Haya. (Primera parte). Jorge Jouroff

05.08.2025

Los días 24 y 25 de junio, en el foro Mundial de La Haya, los Países Bajos fueron sede de la Cumbre de la OTAN 2025, que incluyó un foro público y un Foro de Industria de Defensa. Desde su fundación, en 1949, fue la primera vez que una cumbre de la OTAN se celebra en los Países Bajos.

En un momento que Estados Unidos sacude la política europea, las discusiones, con el telón de fondo de la guerra de Ucrania, toman particular relieve.

Generalmente no lo son, pero seguro ésta vez no fué una cumbre corriente, con el telón de fondo de la nueva política del gobierno de Trump, tanto en lo referente a la guerra de Ucrania como  en su exigencia del aumento de fondos para la  defensa por parte de sus socios europeos. Por supuesto,  esto implica  su estrategia global hacia Rusia. Por esas razones, a la par de la cumbre propiamente dicha se sumaron otras dos en simultáneo: el Foro de Industria de Defensa y un foro público para la discusión de los caminos a seguir de acá en más. Se calcula que concurrieron poco menos de nueve mil personas, entre ellas unos cuarenta y cinco jefes de Estado y de gobierno, así como líderes de los treinta y dos países aliados, cuarenta y cinco ministros de relaciones exteriores y otro tanto de defensa. En total, asistieron unas seis mil personas en representación de diversos países y más de dos mil periodistas.

El discurso de bienvenida del Primer Ministro Schoof fue breve y conceptual; siendo su punto central al aumento del gasto. Declaró que "estamos a punto de tomar decisiones que conduzcan a un aumento sin precedentes de nuestro gasto colectivo en defensa y a un nuevo equilibrio financiero en nuestra alianza" para "fortalecer aún más el vinculo trasatlántico". En un balance de los últimos años, remarcó que "el «fin de la historia» resultó ser una ilusión" y que la paz "debe defenderse y eso implica un precio que hay que pagar". Además de la cumbre propiamente dicha sobre la defensa europea, tuvo dos aspectos más; el foro de Industria de la Defensa y las sesiones estratégicas. Estas ultimas sesiones semi públicas de expertos y dirigentes políticos donde se discutió más libremente sobre la situación actual. Ese es el orden que vamos a emplear en la exposición.

 

Las resoluciones de la Cumbre

La  declaración de la Cumbre de la Haya fué firmada por los jefes de estado y de gobierno de la OTAN. El eje central es, pese a la actitud del gobierno norteamericano,  la reafirmación del atlantismo y por tanto el aumento de las inversiones en defensa. En efecto, el punto uno de la resolución dice que "nos hemos reunido en La Haya para reafirmar nuestro compromiso con la OTAN, (...)  y con el vínculo transatlántico." Y continúa: "reafirmamos nuestro férreo compromiso con la defensa colectiva, consagrado en el Artículo 5 del Tratado de Washington: un ataque contra uno es un ataque contra todos."

Sobre el compromiso de inversión, se comienza declarando que Rusia es "la amenaza a largo plazo" para2035. En consecuencia "los Aliados se comprometen a invertir el 5 % de su PIB anualmente en necesidades básicas de defensa, así como en gastos relacionados con la defensa y la seguridad". El documento desdobla la inversión en dos categorías: Por un lado,asignarán al menos el 3,5% del PIB anual,  "a los recursos básicos de defensa y al cumplimiento de los Objetivos de Capacidad de la OTAN" , acordándose presentar planes anuales, y el restante 1,5% a, "entre otras cosas, proteger nuestra infraestructura crítica, defender nuestras redes, garantizar nuestra preparación y resiliencia civil, impulsar la innovación y fortalecer nuestra base industrial de defensa."  Por ello, en el punto tercero, se declara la necesidad de "expandir rápidamente la cooperación transatlántica en materia de industria de defensa y de provechar las tecnologías emergentes y el espíritu de innovación para impulsar nuestra seguridad colectiva" y eliminar las barreras comerciales en la industria de defensa.

 

El Foro de la Industria de Defensa de la OTAN

Este foro es la continuación lógica de las resoluciones anteriores, y se reunió en paralelo el día veinticuatro de junio, para acelerar el desarrollo de la industria de guerra europea. Si se piensa en las cifras que se acordaron destinar, el negocio de la guerra no podía resultar mejor. Máxime si se tiene en cuenta que hablamos de empresas multinacionales muy poderosas, en un continente desarrollado y con un estado con gran presupuesto destinado a la producción y adquisición de armamento. Los resultados clave anunciados  incluyen:

1.    Publicación del Plan de Acción para la Producción de Defensa (DPAP) de la OTAN.
Es la primera vez que la OTAN  emite una versión pública de su Plan de Acción para la Producción de Defensa. En el documento se describe  "la visión de la OTAN para la agregación de la demanda, el fortalecimiento de la capacidad de producción y el aumento de la interoperabilidad en toda la Alianza."  Con la publicación se busca expresamente  "proporciona mayor transparencia a la industria, permitiendo a las empresas alinear sus inversiones y capacidad de producción con los objetivos de capacidad de la OTAN."

2.    Declaración de Ambición de la Industria.
Representantes de treinta y dos asociaciones empresariales transatlánticas de los aliados de la OTAN "emitieron una declaración conjunta en la que expresan su compromiso de estrechar la cooperación con la OTAN",  declarando "la intención del sector de ampliar la producción, acelerar la innovación y apoyar los objetivos de defensa colectiva." En otras palabras, la industria bélica de parabienes, actuando en conjunto con la estructura y comando de OTAN.

3.    DIANA alcanza su plena capacidad operativa
El concepto de DIANA es un mecanismo para acelerar la innovación en defensa de la OTAN, y  fue declarado plenamente operativo. Conecta innovadores con usuarios finales de defensa de toda la Alianza, así como con empresas e inversores,  apoyando " a docenas de empresas, como la startup neerlandesa Lobster Robotic, en el desarrollo de tecnologías de vanguardia con aplicaciones de doble uso."

4.    Intención de almacenar conjuntamente materias primas críticas.
Doce aliados de la OTAN, incluidos los Países Bajos, firmaron una Carta de Intención para cooperar en el almacenamiento de materias primas críticas vitales para el sector de defensa. Con esta medida se intenta reducir la dependencia de proveedores externos y asegurar el acceso a componentes esenciales para la producción industrial y, en particular, bélica..

5.    Expansión de la Flota Multinacional de MRTT.
El programa Multinacional de Transporte Multifuncional de Cisternas (MRTT), al que ahora se unieron Dinamarca y Suecia, permite mayor alcance y reabastecimiento en vuelo. Estos dos países firman un contrato para dos aviones A330 MRTT adicionales; si se incluye a los Países Bajos y Luxemburgo como países líderes, el programa ahora comprende 12 aviones estacionados en los Países Bajos, Alemania y, próximamente, Dinamarca.

6.    Plan de Acción para la Adopción Rápida (PAAR).
Este programa  "busca acelerar significativamente la adopción de nuevos productos tecnológicos por parte de la Alianza, a la velocidad de su pertinencia, en la mayoría de los casos en un plazo de 24 meses" proporcionando a los Aliados objetivos compartidos y mejores prácticas, con el apoyo de la OTAN, para acelerar la adquisición y la integración, minimizar el riesgo de los nuevos productos tecnológicos y garantizar que se adapten mejor a las necesidades de defensa de los Aliados.

7.    Acuerdo de colaboración sobre los Campos de Innovación.
Varios aliados "firmaron una Carta de Intención para formalizar la cooperación en los Campos de Innovación de la OTAN: entornos utilizados para probar y ampliar las tecnologías de defensa. Estos Campos permitirán a los Aliados y a la OTAN probar, perfeccionar y validar nuevos productos tecnológicos en entornos operativos reales, en estrecha colaboración entre usuarios finales e innovadores." Se busca así garantizar  "soluciones eficaces, seguras y fiables, manteniendo así la ventaja tecnológica de la OTAN."

8.    Estrategia Espacial Comercial de la OTAN.
En la guerra moderna, el espacio pasa a ser un escenario clave. Por ello la OTAN ha publicado una versión pública de su Estrategia Espacial Comercial,  describiendo cómo la Alianza pretende fortalecer la cooperación con los proveedores de servicios espaciales comerciales. " Al eliminar barreras y aclarar los procedimientos, la estrategia facilita una colaboración más segura y eficaz entre la industria espacial y la OTAN." Como vemos, nada escapa ala militarización.

9.    Las sesiones temáticas conducen a un seguimiento concreto.
Siendo el objetivo el desarrollo y aumento de la producción de armamento las sesiones abarcaron también temas concretos, como "las necesidades de capacidad, la seguridad de la cadena de suministro, el acceso a la financiación, los sistemas no tripulados y las amenazas espaciales e híbridas." Como resultados, llegaron a dos conclusiones fundamentales: la primera fue que "la colaboración público-privada requiere una base de confianza mutua, que podría lograrse mediante el desarrollo de un entendimiento común y un enfoque compartido." Es decir, unificar criterios y ensanchar la base de acumulación. La segunda conclusión fue "la necesidad de que las partes interesadas desregulen y simplifiquen conjuntamente los requisitos de cumplimiento, en particular en lo que respecta a la contratación pública, para agilizar la entrega de capacidades."

En la segunda entrega continuamos con el último foro, las sesiones temáticas estratégicas y las conclusiones generales.

Jorge Jouroff
2025-08-05T11:14:00

Jorge Jouroff