La era del plástico. François Graña

29.07.2025

La invención del plástico, un material muy barato, maleable, multifuncional y fácil de desechar, supuso un salto de gigante en el confort de la vida moderna. Abarató los costos de una infinidad de herramientas y objetos de uso cotidiano, mejoró la eficiencia de los vehículos, volvió más accesibles y duraderos muchos alimentos.

 

En términos generales, significó una mejora fantástica en tecnología y en calidad de vida. En un principio se presentaba como un avance civilizatorio indiscutido, pero el crecimiento descontrolado de su producción lo convirtió en amenaza.

La era del plástico se inició en los años 1940; desde entonces, se produjeron unos 9.000 millones de toneladas.  Las empresas líderes son ExxonMobil, Sinopec y LyondellBasell. Desde comienzos de este siglo al presente, su producción se ha más que duplicado y se espera que siga creciendo, dado un aumento incesante de la demanda. En 2023, el mercado mundial de plásticos se estimó en 712.000 millones de dólares (1). El 12 % se incinera, un 9 % es reciclable y el resto se deposita en vertederos o es liberado al medio ambiente, yendo a parar finalmente a los océanos. De sostenerse su ritmo de crecimiento, la producción aumentará un 70 % en 2040 (2)

Se estima que en 2050 los océanos podrían contener más plástico que peces. El 70 % de la basura plástica está representada por la suma de los productos plásticos de un solo uso más los utensilios de pesca abandonados. Los plásticos no sólo contaminan las costas, sino que también afectan a toda la fauna marina. Los animales se enredan en ellos y confunden los fragmentos más pequeños con comida, lo que puede provocar su intoxicación y acabar con su vida (3).

El plástico se desintegra por el impacto del sol, la fricción de las aguas y el viento, pero nunca llega a degradarse del todo: se va partiendo en partículas hasta llegar a ser tan pequeñas como un cabello humano (10 micras). Estos microplásticos terminan formando parte de la composición química del agua, del suelo y de los animales. El caso más conocido es el de los peces; las partículas que van absorbiendo por sus branquias terminan acumulándose en el organismo de sus consumidores. 

Los microplásticos provienen mayoritariamente de la lenta desintegración de los envoltorios, los envases de comida para llevar, la ropa de polyéster, los neumáticos, la pintura y el césped artificial. Un estudio de 2019 reveló que algunos adultos podrían ingerir en promedio entre 39.000 y 52.000 partículas de microplásticos al año, dependiendo de su ubicación y actividad (4).

Una investigación a cargo de la agencia de seguridad alimentaria ANSES de Francia concluyó que, contrariamente a lo que se creía, las bebidas vendidas en botellas de vidrio estaban más contaminadas por microplásticos que las botellas de plástico o las latas. Los experimentos han demostrado que estos microplásticos provienen de la pintura exterior de las tapas. El estudio descubrió que las botellas de vidrio de refrescos, té, cerveza y limonada contenían alrededor de 100 partículas microplásticas por litro, una cantidad hasta 50 veces mayor a la detectada en bebidas enlatadas y... en las propias botellas plásticas (5). Otro estudio de 2024 reveló que cuanto más se abre y se cierra una botella de refresco, más microplásticos se introducen en la bebida a través del tapón. Los investigadores descubrieron que, con cada apertura adicional, los niveles de microplásticos aumentaban, alcanzando 46 partículas por litro en la Coca-Cola en la vigésima apertura y 62 en la Schweppes (6).

Las evidencias de los efectos nocivos de los microplásticos son cada vez mayores. Numerosos estudios demuestran que están apareciendo en la tierra, en los alimentos y hasta en el cerebro humano. Si bien la investigación sobre su impacto sobre la salud humana aún está en desarrollo, existe evidencia que sugiere que afectan negativamente el  intestino, el hígado y  posiblemente incluso el ADN. Una investigación a cargo de Amy Parkhurst, de la Universidad de California, descubrió que los ratones que consumieron microplásticos presentaron intolerancia sistémica a la glucosa, daño hepático y un aumento de la permeabilidad intestinal que puede agravar los problemas hepáticos (7).

El panorama es sin duda muy preocupante. Las voces de alarma así como las decisiones legislativas tendientes a reducir el consumo de plástico -sobre todo en la Unión Europea- se han venido multiplicando. Sin embargo, no parece haber mucho lugar para el optimismo. El afán de lucro del poderoso conglomerado industrial involucrado en la producción de plástico no conoce límites. Sus consejos directivos -siempre presionados por los accionistas- siguen proyectando alegremente el aumento de la producción para así "satisfacer una demanda creciente", como reza la tan conocida muletilla empresarial. Entretanto, no parece haber fuerza en el planeta capaz de ponerles límites. De modo que lo más sensato es prepararse para un muy probable agravamiento de la situación, sin que ello sea sinónimo de resignación.

La única verdadera esperanza reside en la reducción de la demanda, y eso solo puede ser obra de nosotros todos, los consumidores. Una gota, con ser poco, con otras se hace aguacero.

Francois Graña es Doctor en Ciencias Sociales

Foto: Nicolás Celaya / adhocFOTOS

Notas

(1) https://www.statista.com/statistics/1060583/global-market-value-of-plastic/#:~:text=In%202023%2C%20the%20global%20plastics,period%20of%202023%20to%202033.

(2) OCDE (2024), "Escenarios de políticas para eliminar la contaminación plástica para 2040", Publicaciones de la OCDE, París, https://doi.org/10.1787/76400890-en 

(3) "Plásticos en el océano: datos, consecuencias y nuevas normas europeas". Parlamento Europeo. Ultima actualización: 12.2.2024

(4) "Todo lo que debes saber sobre los microplásticos". United Nations Environment Programme, 2 de junio de 2025

(5) Iseline Chaïb et al.: "Contaminación por microplásticos en un conjunto de bebidas vendidas en Francia". Revista de Composición y Análisis de Alimentos, Vol. 144, agosto de 2025.

(6) "Coca-Cola, champion olympique des microplastiques?". Rapport microplastiques sodas, Agir pour l'Environnent, août 2024

(7) https://gacetamedica.com/investigacion/descubren-microplasticos-presentes-alimentos-podrian-afectar-metabolismo-glucosa-organos-higado/

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2025-07-29T05:11:00

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