UY Press - Agencia uruguaya de noticias

01.06.2025

Hablar de afuera a veces es malo, pero en otras puede ser bueno. El no estar involucrado tal vez permita una opinión más serena. Todos hemos, y con razón, expresado una gran satisfacción por la fortaleza institucional y democrática del Uruguay. Esto es una realidad que es necesario cuidar siempre.

Porque no es una situación permanente, puede variar de un momento para el otro si no se le presta atención en el día a día.

Pasaron los tres meses de gestión, y las noticias se concentran en los errores que miembros del Poder Ejecutivo o del parlamento del Partido de Gobierno le crean a la administración. Sin ninguna razón o fundamento. Hagamos el repaso, Ministra de Vivienda que tuvo que ser renunciar por falta de pago de Impuestos. Director de la Oficina de Planeamiento con el mismo problema. Allí comienza  una serie de dificultades que culminan con la Compra de un Predio en Colonización, la aparición de una situación del Presidente de ese organismo, incompatibilidad con el cargo, y la designación de Embajadores. En el medio la vicepresidente del Puerto que renuncio.

A esta altura del siglo XXI, el Frente Amplío está en su cuarta administración, la oposición tuvo solo dos. El Frente debería ser el que tiene un núcleo fogueado, serio y estructurado de cuadros para llevar adelante las principales tareas de gobierno. Sin embargo son esos cuadros los que crean los problemas. Para mí por dos razones. Una enfermedad que se llama ideología y otra militancia, que se ve como trampolín para llegar a la administración.

En medio de esa situación, el Presidente de la República, ese que algunos dicen que no tiene condiciones, es el único que sale invicto. Toma distancia, expresa su opinión, y termina haciendo lo que quiere. Una se pregunta si podrá aguantar cinco años en estas condiciones.

Hagamos el repaso. La Ministra de Vivienda ya no está. La Vice Presidenta del Puerto tampoco. El Presidente de Colonización tampoco -fue despedido de taquito y con un verbal e inconducente apoyo- veremos cuantos de los embajadores propuestos ocupan sus cargos. Me parece que el predio para Colonización no se compra.

Con la propuesta de Embajadores, el Ministro del ramo logró una unanimidad en su contra. No le gustan ni a tirios ni a troyanos. Ni a los parlamentarios de la oposición ni del gobierno. No le gustan a nadie. Es increíble que gente con experiencia y habilidad hayan caído en un error, horror en realidad, de esa naturaleza. Carreras de toda una vida, puestas ahora en cuestión.

Gobernar no es mandar. Ni estar en los medios. Gobernar es solucionar temas, lograr que el país mejore material y espiritualmente, y no crear problemas. Gobernar es valorar la importancia de la reflexión, el silencio constructivo. No es la exposición pública permanente que al final satura y desprestigia.

En Uruguay hay dos grandes fuerzas políticas, el Frente Amplio y el Partido Nacional. Esa es la verdad. Pues bien, hace treinta o cuarenta días estaban en una situación razonable. Ahora discuten a través de los medios de prensa. El Presidente de la República y el Secretario de la Presidencia parece que no están de acuerdo con la compra del predio de Colonización. Los blancos todos los días tienen un nuevo candidato a Presidente del Directorio. Muchachos, bajen un poco la pelota al piso.

No quiero ser solo negativo. Hay un caso de mejoría notoria, la del Ministro de Economía, que durante la campaña electoral del año pasado se paso discutiendo con los que lo iban a nombrar en el cargo. Pues lo nombraron, y ahora trabaja en forma ordenada, hablando menos y haciendo más y  mejora su prestigio  y consideración.

El Presidente Orsi, vive apagando incendios que le crean otros miembros del gobierno, vamos a ver si puede lograr paz entre sus colaboradores, o se anima a una poda. Pero así la cosa no termina bien.

Mientras tanto Lacalle Pou toma distancia. Es evidente que no puede estar conforme. No es buena la fragmentación que se observa en el Partido Nacional. Sin duda está esperando el momento oportuno para hablar y decidir. Vamos a ver, a quien muchos reconocemos como un gran vaqueano de la política,  si logra salir como tantas veces adelante.

No ha ocurrido nada grave en el Uruguay, pero las tendencias no son buenas. Hay que cuidar la gobernabilidad. Cuando se hacen nombramientos en otros partidos, no puede ser que sean para dividir a propios y extraños. Tienen que tener en lo previo todo un proceso de buena fe para lograr consensos. Con cuanto orgullo recordamos que en la Administración anterior, el Presidente pudo tener una relación cordial y saludable con los ex presidentes. Como eso le sirvió al País. Dentro y fuera de fronteras. En estos momentos se esta haciendo exactamente lo contrario. Nada de eso es bueno.

Ruben H. Díaz