Stroessner superado por el estronismo vigente. José Antonio Vera Arenas
01.10.2025
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, viajero empedernido, con 52 viajes al extranjero en sus 25 meses de mandato, tiene gran capacidad para acumular una serie de causas que provocan hartazgo en una población que, en los últimos 80 años, se habituó a soportar varios gobiernos delictivos, con muchas malas muertes y estatizados suculentos robos y negociados impunes.
Sin embargo, nadie le puede negar a Peña, algunos cultos avivados lo llaman Pena, la coherencia que cultiva entre sus actos y sus discursos. A menudo repite, aquí y entre sus interlocutores en el exterior, a los que procura convencer para que inviertan en Paraguay, aspiración tremendamente fracasada hasta ahora, con el argumento de que "éste es un país serio". No se puede negar, porque últimamente, nadie ve, en los hogares ni en las calles, gente alegre y sonriente. La economía es predominante, dijo un barbudo.
Peña arrancó en política afiliado al Partido Liberal, cuya arribista dirigencia le regaló un cargo en el Banco Central, donde lo ubicó el magnate Horacio Cartes que lo coptó para el Partido Colorado, que ya tenía alquilado, invirtiendo algún capital con otros correligionarios del bisoño técnico, a los cuales indujo a traicionar, desde la Vicepresidencia de la República, el 22 de junio del 2012, a Fernando Lugo, el mejor Jefe del Ejecutivo Nacional en los últimos 90 años.
Neutralizado el Partido Liberal, en las elecciones nacionales de 14 meses después, Cartes corrió casi solo y, bajo el eslogan, también coherente, de "Nuevo Rumbo", se apoderó del sillón de mandatario y extendió sus tentáculos empresariales en más campo y más ganado, clubes deportivos, Bancos, farmacias, supermercados, expendedores de combustibles, algunos cada cien metros en Asunción y alrededores. Más de 40 empresas registradas.
Las inversiones, en las que figura el apellido Cartes, asociado con capitales foráneos e, incluso con importantes narcos presos, continúan a un ritmo que, en el punto de la usura financiera, sólo en el curso de los últimos 20 años, supera de lejos a toda la estafa cometida por el régimen del General Alfredo Stroessner y sus íntimos, entre 1954 y 1989, destacando el apoderamiento y distribución, de unos ocho millones de hectáreas de tierra fiscal.
Cuando el tirano fue destituido por Estados Unidos, utilizando la corrupta jerarquía militar paraguaya, la deuda externa era de dos mil 500 millones de dólares. Hoy supera los 20 mil millones, más de 13 acumulados en igual cantidad de años.
MUESTRA DE TITULARES PROMETEDORES
Desde el "Nuevo Rumbo" cartista y, para mostrar independencia lingüística en la campaña electoral del 2023, Peña saltó a "Vamos a estar mejor", consecuente con los intereses de la clase oligárquica a la que cree haber ingresado, ignorando el blindaje que protege a la casta usurera.
Peña, en estos dos años, se ha permitido construir un palacio cerca del "Lago Azul de Ypacarai", en terrenos ajenos, y aparece con fuertes inversiones bancarias, asociado a familiares muy cercanos. Dos semanas atrás, le explotó un escándalo en la residencia presidencial, cuando el servicio doméstico descubrió, en su vestidor personal, sobres con cientos de miles de dólares. Un Senador, suspendido, apuntó que a él y a otros, les han pagado 20 mil para que se sumaran a la bancada cartista. Han cumplido alegremente.
"Aquí no hay lugar para los tibios", ha sentenciado el casi mandatario, lanzando a la policía, el ejército y grupos de sicarios armados, contra comunidades indígenas y campesinas para quitarles la tierra, robarle lo poco que tienen e incendiar sus ranchos y sembradíos, permitiéndoles, con singular solidaridad, que se instalen, con sus cacharpas restantes, en las orillas de las rutas y de las estancias, aborrecidos por el racismo reinante en parte de una población que, en su mayoría, tiene esos mismos orígenes.
Este lunes 29 de septiembre, el feriado nacional en conmemoración de la Batalla de Boquerón, en la guerra contra Bolivia entre 1932/35, amaneció con decenas de heridos y 31 jóvenes presos, algunos torturados según el Magistrado Jorge Rolón Luna, víctimas de la represión policial y paramilitar ocurrida el día antes, en la marcha convocada por la Generación Z, contra el flagelo nacional de corrupción y abandono estatal de todos los servicios sociales, a grados extremos en la salud, empleo y educación.
Rolón Luna, prestigioso Abogado, viene de destapar otro flagelo paraguayo al concluir una larga y minuciosa investigación caratulada "La estafa de los pagarés", protagonizando un nuevo escandaloso capítulo de la corrupción y descomposición moral de esta sociedad, en perjuicio directo de miles de personas y familias entre las más empobrecidas.
El timo se ha desarrollado así: cada pagaré, firmado por el deudor de un préstamo, es fotocopiado varias veces y distribuidos en una red de juzgados que, una vez cumplido el plazo de pago de las cuotas, envían a ujieres u otros a comunicarle al titular del documento que aún le falta honorar su deuda.
Empleadas domésticas, docentes, pequeños empresarios, declaran ahora que, contra sus reclamos, vienen pagando desde hace años, bajo presión judicial, un dinero que no deben, alimentando una furia que ha obligado al Ministerio Público a convocar a cuatro jueces de paz, ocho ujieres, nueve actuarios, trece oficiales de justicia y 27 abogados, acusados de prevaricato y documentación falsa.
DIPLOMAS FALSOS, SUICIDIOS Y DROGAS
La angustia que provocan esos delitos, el enorme desquicio que se constata en todos los servicios públicos, la desocupación, el hecho de que apenas el 25 por ciento de los asalariados percibe el mínimo, de 400 dólares, cuando 800 cuesta vivir, y el impetuoso aumento de la canasta familiar, explica parte de las causas que han elevado la taza de suicidios en el país, que superan mil 500 en los últimos 20 años, entre niños y jóvenes que van de 7 a 17 años de edad.
La Corte registra 75 mil abogados inscriptos, uno cada 90 habitantes, pero esa suma aumenta en el ejercicio con los licenciados y otros actores que operan con patente ajena. Frente a ese absurdo, apenas hay poco más de seis mil médicos en todo el país, aunque en universidades del este, hay un aluvión de estudiantes brasileros de medicina que, con la mitad de años y de precio, retornan a su país con diplomas de médicos. Los ingenieros paraguayos, no superarían el millar. Sin control de calidad, haciendo de la enseñanza un negocio más y muy lucrativo, entre el 2000 y el 2010, fueron creadas 34 universidades privadas, varias propiedad de parlamentarios semianalfabetos.
Cerca de 400 letrados, tienen título de Universidades que no existen, pero esos diplomas los habilitan para ocupar cargos públicos, de preferencia en el parlamento, impuestos por la narcopolítica, como muchos se acusan en plenas cámaras, amenazando que si los echan, muchos amigos caerán atrás.
Eulalio Gómez, capo poderoso del noreste del país, Senador amigo de Cartes, fue ejecutado hace unos meses en su domicilio, y ese crimen, como otros, sigue impune. El destino final de sus propiedades, en inmuebles, vehículos, animales, y cuentas bancarias, está en plena disputa entre sus más dilectos socios del mundo gansteril.
MUESTRARIO FILOSOFICO
"Que nadie se confunda, hoy no son los títulos y diplomas universitarios que acreditan para ser funcionario público, sino la afiliación al Partido Colorado", remarcó Peña en un mitin presidido por su patrón y, de facto, Comandante en Jefe del país, el multimillonario Horacio Cartes, catalogado por Estados Unidos "justificadamente corrupto", y cabeza de una organización regional del narcotráfico, contrabando, y lavado de dinero (sucio?).
Desde hace un año, la prensa comercial dedica amplios espacios al culebrón de un Senador, que se dice Abogado, pero amnésico en cuanto al nombre y dirección de la Facultad donde se recibió. Tampoco recuerda a algún condiscípulo. En mérito a su pertenencia colorada, llegó a la Cámara Alta que, en un par de meses, lo nombró Presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados. Rechazado por honorables envidiosos, y por el fétido olor que despedía su caso, se vio forzado a renunciar al Jurado, pero no al Senado.
Algo parecido había ocurrido meses antes, con otro patriota con carnet del Partido, falso jurista, secuestrador de terrenos ajenos, linderos con su propiedad y activo evangelista. Otro más, también parlamentario con diploma dudoso, está siendo escrachado estos días por las redes sociales. "En Paraguay nos conocemos todos, aunque no hablemos", me dijo un amigo colorado.
En ese tono de voz baja, se dice que Enrique Riera, Ministro del Interior, podría renunciar antes que lo sometan a juicio político, como reclaman las víctimas de la represión. Sus pasos no lo ayudan: extitular de Educación con pésima nota, y exintendente de Asunción, cuando el primero de agosto del 2020, se produjo el incendio del Super Ycuá Bolaños por falta de inspección técnica. Los dueños cerraron las puertas, "para que no nos roben". 400 personas cremadas y el doble de lesionados. Es meritorio coautor, además, con el Senador Fidel Zabala, ilegítimo poseedor de miles de hectáreas regalada por Stroessner entre sus íntimos, de una ley que sanciona con años de cárcel a quien ocupe una parcela fiscal.
El denominador común, entre dirigentes altos y medianos, es que todos, en menos de cinco años, se convierten en millonarios robando los dineros públicos, en un pillaje impune y planificado, legalizado como institución de Estado, al que "hay que usar como a una mujer bonita", según la lógica del filósofo humanista Cartes.
Al recién forzado a renunciar Intendente de Asunción, también hombre del patrón, Nenecho Rodríguez, se le han desaparecido 500 mil millones de guaraníes (7/dólar) y declara que ignora dónde han ido a parar. Disfruta vacaciones en playas lejanas junto a su esposa, quien llegó a Senadora comprando el cargo. Dónde está la plata?.
La narcopolítica está instalada bajo la manta de democracia, familia, Dios y el culto al dinero y a Stroessner, al que nunca olvidan, sin dejar de observar que el régimen actual, registra una notable diferencia en algunos aspectos, con la tiranía ejercida durante 35 años por ese caudillo asistencialista, canalla, criminal, violador de adolescentes campesinas, ladrón y vendepatria:
1) el robo al pueblo, en activos públicos y tierra, entre la jerarquía civil, militar y empresarial, estuvo encabezada entonces, por una autoridad paternalista orgánica. Hoy, esos delitos se han generalizado, socializado, dicen algunos que ensucian las palabras, debido a la carencia de un mandamás que la masa quiera y respete, aunque sea por miedo,
2) el narcotráfico nació en Paraguay con Stroessner, amigos y familiares, pero la proporción actual aleja cualquier semejanza y,
3) la represión ideológica, en particular el anticomunismo prevaleciente hasta hoy, fue criminal y de tremenda brutalidad, que arrojó miles de muertos, paralíticos y exiliados. Hoy es igual, pero es sutil, emplea métodos modernos para exterminar opositores por hambre, cárcel, desapariciones, con operativos hipócritas y demagógicos, falsos positivos y guerrillas fantasmas, todo dirigido por expertos del sionismo israelí y del Comando Sur, instalado en las tres fronteras, junto a Brasil y Argentina.
LA TRANSICION DERIVO EN TRAICION
Cartes y Peña viven abrazados al régimen genocida de Israel traicionando la historia de Paraguay, cuyo pueblo también fue víctima de un genocidio, cuando se produjo la invasión de los ejércitos de Argentina, Brasil y Uruguay, en la Guerra de la Triple Alianza, mejor cuatriple porque la diseñó y financió el imperio inglés, entre 1864 y 1880, porque no soportaba un país soberano.
Frente a ellos, frente al divorcio del Estado y el pueblo, a su corrupción, a sus mentiras, a los fraudes instalados como política de Estado, resurgen el hartazgo, la bronca, los insultos, el abucheo, en un movimiento que va tomando fuerza y conciencia, atento a que también aquí, el imperio instale un clima de "primavera árabe" o "nepalés", con inseguridad institucional que confunda, desmovilice y castre a la masa rebelde, aprovechando su falta de programa y de formación ideológica, mayoría jóvenes sin trabajo ni estudios, con mal presente y sin futuro, rico en emoción e impotencia.
A título de hipótesis, el régimen cartista, podría sacrificar, en cualquier momento, a su peón más querido, que es Peña, para que asuma el caballo, que podría ser Bachi Nuñez, Presidente del Senado, representando a la ultraderecha más grosera, e igualmente atada a las órdenes de Washington, a las congregaciones transnacionales, religiosas y financieras, a la privatización de los organismos públicos y a la succión, operada por Cartes, en beneficio de sus bancos personales, de los activos del Instituto de Previsión Social (IPS) y de la Agencia Nacional de Electricidad (ANDE), ente otros bienes nacionales, codiciados por inversores sionistas.
El repelente Stroessner, creó IPS y, como buen demagogo, hasta pagaba el cajón de un muerto pobre, y ordenaba repartír entre el pobrerío vecino, todos los viernes en las comisarías, una canasta con fideos y carne de animales robados por uniformados. Entre otras atrocidades, unos 20 mil seres humanos, militantes, indecisos e indiferentes, fueron torturados en las cárceles, miles asesinados, y unos 400 perseguidos políticos debieron exiliarse. Pero, muy pocos fueron emigrantes económicos en esos 35 años de anticomunismo.
Era una tiranía, un régimen despótico, repudiable, asesino, pero ¿cómo podemos etiquetar a los gobiernos colorados, que le siguieron en la prometida transición a la democracia, con Dios y el amor a la familia que, con igual pregón sepultaron al mejor, encabezado por Fernando Lugo, apenas soportado cuatro años, para llegar a éste, de Cartes y Peña, reprimiendo opositores, como se ha repetido estos últimos días, lanzando policías en moto, dopados, con varillas de acero, para herir a personas pacíficas, paradas en las veredas, mirando, al tiempo que la montada lanzaba sus caballos pisando a la gente pacífica, movilizada contra la corrupción y por un cambio político, que convocó la Generación Z por las redes sociales.
Tres décadas de transición a la democracia registran decenas de periodistas y campesinos asesinados, con militantes políticas presas en horribles condiciones y sus hijas niñas y sobrinas asesinadas o desaparecidas, y con más de dos millones de emigrantes que debieron abandonar su país, buscando una vida menos penible y recursos para mantener a sus familiares entre los seis millones que aún habitan el país, la mitad en la miseria y la pobreza extrema.
La reserva moral del país, entonces, está facultada para calificar de traición a la transición que nació en febrero de 1989, "a favor de la familia y la democracia, bendecida por Dios". Y, si falta algo, bajemos a las plazas de Asunción y de las ciudades del Departamento Central, habitadas por más de dos millones de personas, para ver a cientos de jóvenes dopados, balanceándose, sin interés en nada, con la vista perdida o, quizás mirando al cielo, hijos de los hijos traicionados.
José Antonio Vera Arenas
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias