Corrupción

Caso Lava Jato cumple dos años con un sin fin de escándalos e involucrados en Brasil

17.03.2016

RÍO DE JANEIRO (Xinhua/Pau Ramírez) - El caso Lava Jato, que investiga una gigantesca red de corrupción alrededor de la petrolera estatal brasileña Petrobras, ha sacudido el país entero y nadie sabe hasta dónde llegará, viendo que cada semana, hay novedades, nuevos implicados y nuevas ramificaciones del mismo.

Este jueves, día 17 de marzo el caso Lava Jato completa dos años, cuando fue detenido el cambista Alberto Yousseff, en lo que era el inicio del descubrimiento de una red ilegal que desviaba dinero de Petrobras para financiar los partidos políticos.

Desde entonces, más de 60 personas, entre ellas políticos de primer nivel y los ejecutivos de las principales constructoras del país, fueron encarceladas, mientras que las acusaciones llegaron recientemente al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), quien para escapar del cerco de la Justicia, fue designado hoy como ministro de la Presidencia, con lo que gana foro privilegiado y sólo podrá ser investigado ahora por el Supremo Tribunal Federal.

El caso empezó el 17 de marzo de 2014, con la detención de 17 personas, incluido Alberto Yousseff, sospechoso de liderar un esquema de lavado de dinero. Tres días más tarde, el exdirector de Abastecimiento de Petrobras, Paulo Roberto Costa, fue detenido, acusado de haber recibido un Land Rover de Yousseff, siendo descubierto mientras intentaba destruir documentos.

Costa realizó la primera declaración explosiva ante la Justicia en agosto de 2014, revelando el esquema de corrupción en Petrobras y el cartel formado por empresas para repartirse y amañar los contratos, el pago de propinas y el financiamiento ilegal a partidos políticos.

En julio de 2014, el caso empezó a ganar más notoriedad cuando el juez federal Sergio Moro mandó a la Corte Suprema las primeras sospechas de participación en el esquema del expresidente del país y actualmente senador Fernando Collor.

Las investigaciones llegaron a las principales constructoras del país, una vez que Yousseff acordó colaborar con la Justicia a cambio de tener rebajada su condena en octubre de 2014. A mitades de noviembre de 2014, fue detenido otro exdirector de Petrobras, Renato Duque, y en enero de 2015, el exdirector de Internacional de la petrolera, Nestor Cerveró, acusado de corrupción y lavado de dinero.

En febrero del año pasado, apareció un nuevo delator, el exgerente Pedro Barusco, que aseguró que el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) recibió entre 150 y 200 millones de dólares en propinas.

En abril de 2015, tres exdiputados federales, Pedro Correa, André Vargas y Luiz Argolos, fueron detenidos, y unos días más tarde, tuvo lugar la detención del tesorero del PT, Joao Vaccari, por haber recibido coimas de contratos de Petrobras.

Otra figura política que cayó fue José Dirceu, número dos del gobierno de Lula, acusado de corrupción, lavado de dinero y formación de cuadrilla. Posteriormente, el fiscal general, Rodrigo Janot, denunciaba al presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, y al expresidente Collor (1990-1992), por haberse favorecido también de la trama.

El cerco a Lula empezó a finales del año pasado, primero con la prisión del empresario y amigo personal José Carlos Bumlai, al tiempo que aparecían las primeras denuncias de que el exmandatario sería el supuesto dueño de dos viviendas en el estado de Sao Paulo, una en el litoral y otra en el interior, que habría recibido de empresarios relacionados con la gigantesca red.

El exlíder del gobierno en el Senado, Delcidio Amaral, fue detenido en noviembre, así como el publicitario Joao Santana, responsable de las dos campañas electorales de Dilma Rousseff, detenido a finales de febrero. Lula fue llevado a declarar ante la policía el 4 de marzo, causando una brecha en el país entre sus partidarios y sus detractores.

Desde el inicio del caso, son ya 39 acusaciones criminales, 494 personas y empresas investigadas, 1.114 procedimientos instaurados, 117 mandatos de conducción coercitiva y 482 búsquedas y aprensiones.

Un total de 67 personas fueron condenadas, sumando penas por valor de 925 años y 11 meses de prisión. Se acordaron 49 colaboraciones con la Justicia a cambio de rebajas en las penas, cinco acuerdos de clemencia y 97 solicitudes de cooperación internacional en 28 países.

En el 42º Supremo Tribunal Federal, donde se juzgan los casos de personas con foro privilegiado, se investiga a 62 personas, hay 21 denuncias en marcha, entre ellas una contra el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, cuatro prisiones preventivas, 42 investigaciones instauradas, siete denuncias y 108 quiebras de secreto bancario.

El caso Lava Jato ha ensalzado a héroe nacional al juez Sergio Moro y ha provocado el miedo de todas las clases política y empresarial de Brasil, que han visto cómo la famosa impunidad ha acabado y el pueblo pide condenas y justicia, cansado de corrupción y de ver cómo servicios básicos, tales como la educación, la sanidad o los transportes, siguen dejando mucho que desear.

El caso pero, parece no tener fin y falta saber ahora hacia dónde seguirán las investigaciones y qué pasará con Lula, una vez ha sido nombrado ministro de la Presidencia para intentar escapar de las investigaciones judiciales comunes.

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2016-03-17T08:56:00