Elecciones primarias presidenciales

Chile: La comunista Jeannette Jara gana con el 60,5%, escrutados 77,5% de los votos, y representará al oficialismo

29.06.2025

SANTIAGO (Uypress)- La izquierda chilena elige a la comunista Jeannette Jara para disputar en noviembre la presidencial a una derecha que avanza imparable. Con 77,5% votos escrutados, la exministra de Boric, de 51 años, obtiene un 60,5% en unas primarias oficialistas marcadas por una bajísima participación. Tohá, socialdemócrata, llega en segundo lugar con 27,6%

La izquierda chilena ha elegido este domingo a la candidata que los representará en la primera vuelta de las presidenciales del 16 de noviembre frente a las derechas que avanzan imparables: Jeannette Jara, de 51 años, militante del Partido Comunista. Con el 77,5% de los votos escrutados, la administradora pública, abogada y magíster en gerencia pública ha obtenido un contundente 60,5%, frente a la socialdemócrata Carolina Tohá, que alcanza un 27,6%. El representante del Frente Amplio de Gabriel Boric, el diputado Gonzalo Winter, ha quedado en tercer lugar con un 8,9%, mientras que el congresista Jaime Mulet, de la de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), llega último con un 2,9%. La elección de Jara marca un hito para el Partido Comunista chileno: se trata de la primera vez desde el retorno a la democracia en 1990 que esta fuerza política, que estuvo en la oposición a los gobiernos de centroizquierda de la transición, logra instalar a una candidata de sus filas en la carrera a La Moneda, apoyada -al menos institucionalmente- por todo el sector. El resultado de esta primaria, a su vez, conlleva un gran golpe para las fuerzas moderadas del progresismo -encarnadas por Tohá en esta competencia interna-, que quedan subyugadas nuevamente a los sectores radicales de la izquierda.

Ha sido una primaria marcada por la bajísima participación, aunque se desarrolló normalmente en todo el territorio y, como habitualmente sucede en Chile, los recuentos han sido rápidos y los resultados -ya categóricos- comienzan a conocerse menos de una hora después del cierre de mesas, a las 18.00 hora chilena. De acuerdo a las primeras proyecciones, habrían participado un poco más de un millón de personas, en Chile y en el extranjero. Aunque se trataba de una votación voluntaria -solo estaban excluidos de votar los afiliados a partidos que no tuvieron primarias- se trata de una cifra que está incluso por debajo de los pronósticos menos auspiciosos. En las primarias de 2021 entre Boric y el comunista Daniel Jadue, donde compitieron solo dos partidos con dos candidatos, acudieron 1,7 millón de votantes. Era el piso que se había fijado el propio oficialismo para mostrar si tenía la capacidad de movilizar a su base social, de proyectar unidad y de demostrar que sigue siendo competitivo frente a una derecha fuerte que llegará con tres candidatos a la primera vuelta del 16 de noviembre: Evelyn Matthei (de la derecha tradicional agrupada en la alianza Chile Vamos), José Antonio Kast (de la derecha conservadora del Partido Republicano) y Johannes Kaiser (de la ultraderecha del Partido Libertario).

Este nivel de participación, sin embargo, no alcanza para asustar ni de lejos a la derecha. Con la elección de una candidata única del Partido Comunista, sin embargo, la presidencial chilena se vislumbra polarizada. Kast, de la derecha extrema, se ha instalado en las últimas semanas incluso por sobre Matthei, la economista moderada que fue por meses la favorita para llegar al Gobierno en marzo de 2026, cuando acabe la Administración de Boric.

La unidad de la izquierda será una gran prueba a partir de esta noche. La campaña fue subiendo de intensidad en las últimas semanas y las diferencias de fondo quedaron expuestas ante la ciudadanía, sobre todo entre Tohá -que arrancó la carrera como favorita- y la candidata ganadora. "Donde [el Partido Comunista] ha gobernado en el mundo los países se han estancado socialmente y ha cundido la pobreza", acusó la politóloga socialdemócrata, de 60 años, en uno de los debates. Ambas exministras del Gobierno de Boric -Tohá del Interior y Jara de Trabajo- mostraron que encarnan opciones muy diferentes de concebir el papel de la izquierda en 2025 y las necesidades de un país como Chile, estancado económicamente hace más de una década y con desafíos urgentes como la crisis de inseguridad. En esta campaña ambas dejaron en evidencia diferencias fundamentales respecto de la convivencia del Estado y el mercado, el crecimiento económico, el manejo de la delincuencia, las relaciones exteriores, el control de la inmigración irregular, entre otras materias.

"Lo importante es que, al final del día, los sectores progresistas vamos a estar todos unidos detrás de una sola candidatura", aseguró el presidente Boric por la mañana, apuntado a una preocupación de todo el sector político: si dadas las grandes distancias entre las propuestas oficialistas y lo caliente de la competencia, el resultado generará dispersión y si la ganadora -Jara- tendrá efectivamente un torrente de poder político para enfrentar a una derecha que tiene los vientos a su favor. A la oposición, de hecho, le conviene que la elegida haya sido la militante comunista. Sobre todo a Matthei que, con Tohá fuera de competencia, intentará conquistar a los sectores moderados de centro y de centroizquierda que no están dispuestos a apoyar a una carta de la izquierda radical.

La candidatura de Jara, al menos públicamente, pareció distinta al doctrinario Partido Comunista chileno, una colectividad que no ha girado hacia posiciones moderadas (como fue el caso el PC italiano y el eurocomunismo de Enrico Berlinguer), que se sigue definiendo como marxista-leninista y, por lo tanto, no ha sacado el concepto de dictadura del proletariado de su doctrina. El PC chileno tiene compromisos internacionales con regímenes de Cuba, Laos, Vietnam o Corea del Norte y su presidente, Lautaro Carmona, participó en abril pasado, por ejemplo, del II Foro Internacional Antifascista, realizado en Moscú, Rusia. Jara, sin embargo, ha marcado distancias con la dirigencia de su partido, en temas sustanciales como la necesidad de empujar una nueva Constitución.

Foto: Diario UChile 

Internacionales
2025-06-29T20:20:00

UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias