02.03.2012

BUENOS AIRES, 2 Mar (UYPRESS) – El vicepresidente argentino está severamente comprometido. El magistrado dijo anoche que el amigo de Boudou que puso el dinero para poner en marcha la imprenta “no aparece como alguien con la solvencia para hacerlo”. Mire video.

El fiscal Carlos Rívolo está dispuesto ir hasta el hueso en la causa que involucra al vicepresidente argentino, Amado Boudou, en el “caso Cicconne”, en el que podría ser imputado por supuestos delitos de lavado de dinero y negociaciones incompatibles con la función pública. Hasta ahora el jerarca se limitó a decir que todas las denuncias en su contra son mentiras.

A lo que el fiscal, le contestó: “Lo entiendo a Boudou, decir que no es mentira hubiera sido un sincericidio”. Rívolo fue entrevistado anoche por el periodista Nelson Castro en el programa “El juego limpio” que se emite por Todo Noticias.

“Lo que nos toca como fiscales es formular una acusación y estamos investigando sobre lo que consideramos bases ciertas para la apertura de un caso”, consideró.

Rívolo brindó detalles respecto a s investigación “Lo que se investiga es un proceso en el cual un grupo de gente se hace cargo del levantamiento de la quiebra de ex Ciccone de una forma por lo menos sospechosa”, dijo, respecto de la mayor imprenta de la Argentina, la ex Ciccone Calcográfica, habilitada para imprimir documentos y papel moneda.

Luego, se refirió a Alejandro Vandenbroele, el empresario y amigo de la juventud de Boudou, que se hizo cargo de colocar el primer monto para levantar la quiebra de la imprenta. “Vamos a verificar qué control hubo sobre Vandenbroele al depositar 520 mil pesos siendo monotributista”, aseguró. “No aparece como alguien con la solvencia para hacerlo”, agregó.

p.t.

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