Instituto surcoreano afirma que Pyongyang realizó ejecuciones públicas a raíz del coronavirus

10.01.2024

SEÚL (Yonhap) - Corea del Norte ha llevado a cabo ejecuciones públicas de aquellos que violaron las regulaciones contra el coronavirus, según mostró, este miércoles, un libro blanco de derechos humanos publicado por el Instituto Surcoreano para la Unificación Nacional (KINU, según sus siglas en inglés).

Un desertor norcoreano que llegó a Corea del Sur el año pasado testificó sobre una ejecución pública, según el libro blanco publicado por el instituto, dependiente de la oficina del primer ministro surcoreano.

Sin embargo, el instituto no dio más detalles sobre la ejecución pública, tales como cuándo y cómo tuvo lugar, debido a preocupaciones sobre posibles represalias contra los familiares del desertor norcoreano que permanecen en el Norte.

El libro blanco, para el que también se realizaron entrevistas a otros 70 desertores que llegaron a Corea del Sur entre 2018 y 2023, contiene testimonios que señalan una posible disminución en las ejecuciones públicas, pero es demasiado pronto para concluir si las ejecuciones públicas en realidad se han vuelto menos comunes o si se llevan a cabo lejos del ojo público.

Corea del Norte ha sido acusada durante mucho tiempo de cometer atroces abusos contra los derechos humanos, que van desde mantener a prisioneros políticos en campos de concentración hasta llevar a cabo torturas y ejecuciones públicas.

El libro blanco dice que Corea del Norte ha estado tomando medidas para fortalecer su control sobre los residentes, aumentando el número de delitos punibles con la muerte mediante la promulgación de leyes especiales sobre medidas antivirus, delitos relacionados con drogas y acceso a información externa.

También mostró que Pyongyang ha estado bloqueando de manera más estricta el acceso a información externa.

En 2020, el reclusivo país adoptó una nueva ley sobre "rechazo de la ideología y la cultura reaccionarias", que prohíbe a las personas distribuir o ver información procedente de medios de Corea del Sur, Estados Unidos y otros países.

A Corea del Norte le preocupa que una afluencia de información externa pueda representar una amenaza para el presidente del Comité de Asuntos de Estado norcoreano, Kim Jong-un, su líder nacional.

Se citó a un desertor diciendo que una persona fue sentenciada a siete meses de trabajo, en 2019, por ver una serie de televisión surcoreana, mientras que otro desertor dijo que son comunes la requisa o incautación aleatorias de ordenadores, teléfonos móviles y grabadoras de voz.

El informe oficial también señala que el derecho a la salud de los norcoreanos están siendo gravemente vulnerado, debido al aparente colapso del sistema de salud pública del país.

Se citó a los desertores diciendo que tenían que contratar médicos de manera privada, o sobornar a funcionarios de salud para recibir tratamientos médicos.

El informe dice que los residentes norcoreanos tienden a usar drogas con fines de tratamiento médico debido a la falta de medicinas y de conocimiento médico, lo que resulta en casos de adicción a drogas que provocan la muerte.

Además, según el documento, Pyongyang ha procurado mejorar los derechos de las mujeres a través de medidas políticas, y el estatus social de las mujeres en los hogares ha mejorado debido a sus roles económicos más importantes, pero las norcoreanas todavía siguen expuestas a la violencia doméstica y a violaciones en el Ejército.

Internacionales
2024-01-10T12:55:00

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