ENTREVISTA

Entrevista a la senadora Lucía Topolansky

28.02.2014

MONTEVIDEO (Uypress/Ana Jerozolimski)De cara al Día Internacional de la Mujer, que se señala el 8 de marzo, realizamos una serie de entrevistas especiales con mujeres uruguayas, destacadas en sus respectivos ámbitos, mujeres que lucharon y continúan luchando , cada una en su área y con sus propios desafíos.

Nos pareció importante, en la parte política, comenzar con Lucía  Topolansky (69), Senadora y esposa del Presidente de la República José Mujica. Este es el diálogo mantenido.

LA MUJER EN URUGUAY

P: Senadora Topolansky, considerando su condición de Primera Dama del Uruguay, de legisladora, la Senadora más votada en la lista más votada de su partido, creo que es relevante comenzar preguntándole qué significa  para usted el Día Internacional de la Mujer...

R: A mí me parece muy importante , aunque el Día de la Mujer debiera ser todos los días. Partiendo un poquito de esa premisa, que haya un día específico en el calendario para visualizar el rol de la mujer, sus derechos y posibilidades,  que muchas veces quedan en un segundo plano. Hace muchos años que la mujer viene en una lucha por ir en un pie de igualdad en las sociedades, en algunas está más avanzada pero en otras está muy atrás.Y mientras existan esas situaciones ,va a ser día de lucha. Después, si lo logramos, sería un día de celebración.

P: ¿Cómo ve a Uruguay en este sentido?

R: Recordemos que Uruguay tempranamente reconoció a la mujer porque iniciado el siglo XX el gobierno de Batlle y Ordóñez le dio el voto, le dio la posibilidad de divorcio por sola voluntad ; estaba preocupado Batlle y Ordóñez por que la mujer estudiara y creó una universidad, ya que las familias no querían enviarlas a la universidad donde iban los varones. O sea que  la mujer empezó a tener un protagonismo. Ese protagonismo tuvo un retroceso en la dictadura y después de la dictadura se retomó ya con otra filosofía porque en el mundo se habían producido cambios.

 Se retomó el rol de la mujer y yo creo que hoy en Uruguay la mujer ha tenido muchos avances. El 60% o un poco más de la matrícula universitaria es femenina. Eso nos habla de que en el mundo de los académicos, de los más capacitados, están las mujeres. En el mundo de la ciencia, de la investigación hay muchísimas mujeres. El Poder Judicial dentro de poco creo que va a ser todo femenino. Si bien no se puede medir sólo por la cuestión parlamentaria, a nivel del parlamento todavía falta más presencia; hay en otras responsabilidades de la sociedad: la conducción de la principal empresa pública que es la empresa de telecomunicaciones la hace una mujer..

P. Carolina Cosse, Presidenta de ANTEL, sumamente emprendedora...

R: Y brillante. Es una ingeniera. Ama la profesión y ama las telecomunicaciones y le ha puesto una dinámica a la empresa que no tenía y yo creo que todo eso se empieza a valorar. La sociedad empieza a mirar eso. Ahora todavía nos falta la inclusión de la mujer de los sectores más pobres de la sociedad que son los sectores más difíciles de incluir en todo, pero principalmente las mujeres; en eso nosotros tenemos una serie de programas de capacitación porque la capacitación parece que no, pero es lo que puede abrir las puertas

P: Es que la  base es la educación ¿verdad?

R: La base es la educación evidentemente y también precisamos el desarrollo de una infraestructura de apoyo, que la mujer tenga un lugar donde dejar a su niño. La mujer, en general asume en las familias el tema de cuidado tanto sea de niños, de adultos mayores como de discapacitados y no tenemos todavía una fuerte infraestructura que la ayude, que ella no quede esclavizada a tener que desarrollar sí o sí esas tareas, un sistema de cuidados. Nosotros estamos trabajado en eso, hemos avanzado algo pero obviamente todavía nos falta un montón.

P: Usted es vista como una mujer fuerte en la política, como ya dije antes, la Senadora más votada...y esto me lleva a preguntarle cuál siente que es la impronta especial de la mujer en la política nacional.

R: Yo no me posiciono desde la queja, me posiciono desde la lucha. Y  las responsabilidades que he tenido a lo largo de mi vida las he tenido porque peleé y estoy contenta por eso. Yo siempre le digo a la mujer uruguaya: luchen, militen, háganse fuertes y traten de posicionarse lo mejor posible porque entonces se van a ganar el lugar. Hay  toda una polémica sobre las medidas de discriminación positiva. Ya la palabra discriminación no me gusta, pero se llama así, de cuotas,  y eso y yo siempre tengo la duda qué fortaleza da llegar por una forma así. Si yo miro en el mundo y miro mujeres muy poderosas que ha habido en todo el mundo, llegaron porque pelearon, porque militaron, porque debatían por ideas.Entonces a mí me parece que ahí está una de las claves. El sector al que yo represento es el que puso más mujeres en el parlamento y sin necesidad de tener esa concepción de cuotas. Lo puso porque estaba convencido y si hay algunas compañeras que no quisieron tener un lugar parlamentario es porque no pasa eso otro que yo le comentaba, que el sistema de cuidados todavía no lo tenemos suficientemente desarrollado como para liberar determinadas horas y priorizaron sus hijos o su atención familiar.

P: ¿Le parece bien?

R: Yo no tengo nada que decir, yo no critico eso, todo lo contrario, son opciones y uno tiene que ser libre. Sin embargo, cuando uno va a las luchas sociales, a las luchas que se dan en los barrios en distintos temas, usted ve que las que capitanean son las mujeres. Cuando hemos hecho construcción de viviendas en varios barrios por autoconstrucción, las que ponen más esfuerzo son las mujeres

P: Eso de sexo débil no va con nosotras, es un mito...

R: Es un mito. Además yo creo que hay otro problema y que es que las mujeres a veces ingresan al parlamento y sólo atienden los temas sociales. No tengo nada contra eso pero también nosotras podemos ser eficientes en los temas económicos, en los temas industriales, en los temas de la Defensa Nacional, en otros temas.

P: Hubo Ministra de Defensa mujer, Azucena Berrutti, en el gobierno de Tabaré Vázquez.

R: Exactamente. Si nos acorralamos sólo en algunos temas entonces como que fijamos una matriz parcial y yo creo que debe haber mujeres en todas las ramas. Cuando yo veo oficios tan duros como puede ser el de camionero, en Uruguay  y veo que ya hay mujeres camioneras , me digo ¡pah, pero son valientes! Es que no es fácil  estar en una carretera, en la soledad de la noche... pero sin embargo, eso va rompiendo en el imaginario machista. Latinoamérica es muy machista, no tanto Uruguay, pero está eso. Va rompiendo esa imagen de reclusión en el hogar que es la que tenemos que superar. Por eso yo las conmino a la lucha.

LA RIQUEZA DE LA VARIEDAD

P: ¿Le parece que debiera haber plena igualdad y que eso es lo deseable? Se lo pregunto porque las diferencias entre el hombre y la mujer existen, ¿verdad?

R: Yo creo que los seres humanos tenemos que ser todos iguales en oportunidades, en posibilidades, en derechos. Después vamos a ser todos distintos porque cada ser humano es un mundo en sí mismo, pero no puede ser que por ejemplo, una empresa tome un ingeniero hombre con un salario y una ingeniera mujer con otro salario. Hace unos días hablábamos con alguna gente del mundo de la medicina y me decían que en el campo de la cirugía y sobre todo de la cirugía de tórax y de corazón, casi no hay mujeres en Uruguay.  Es una rama que está siendo netamente masculina y como que se asocia todavía con la fuerza cuando  el instrumental, el conocimiento, la ciencia, los recursos han avanzado de una manera fabulosa. O sea que  tenemos que ir renglón a renglón venciendo esas cosas.

P: Lejos de pretender hacer una generalización muy simplista ¿le parece que hay cosas -quizás usted lo ve en política- en las que la mujer es mejor que el hombre?

R: Creo que hay mujeres maravillosas, excelentes y hombres maravillosos y excelentes. Por eso creo que no pasa por ahí la cosa. Yo creo que hay determinadas cualidades de la mujer porque somos más detallistas, tenemos a veces la capacidad de atender varios problemas a la vez, que nos dan especiales cualidades para algunas tareas. Por ejemplo, en mi casa se cultivan flores que yo debo vender y el cultivo de la flor que supone toda la actividad de despimpollar, de tratar a la flor que es un objeto de belleza, se adapta más a la mano de la mujer que es una mano más delicada, con movimientos distintos. Esas  son partes naturales del asunto; esa parte no me aflige.

Yo tuve un incidente el otro día en el parlamento porque estábamos en la sesión y yo hablaba con el legislador que estaba al lado mío y otro legislador que estaba haciendo uso de la palabra se estaba refiriendo a mi persona, pero como las mujeres tenemos la capacidad de escuchar dos cosas a la vez, cuando él se quejaba que yo no lo estaba escuchando, lo tuve que interrumpir y hacerle la precisión para que vea que sí..Entonces, esas cualidades son femeninas y está bien y las tenemos que usar y son válidas, pero yo creo que es sabio que haya mujeres y hombres, variedades.

 Yo creo que lo más rico de la naturaleza humana es la variedad y sería aburridísimo si todos fuéramos absolutamente iguales. La aventura de conocer gente nueva, gente con cosmogonías diferentes a las nuestras, con culturas de otro tipo y tratar de meterse en los zapatos de los otros es una aventura maravillosa si la hacemos sin sectarismos, sin prejuicios en la cabeza .Y  ahí van las mujeres y los hombres con sus aportes diferentes, los jóvenes y los viejos,... no pasa ni por lo de género ni por lo racial, ni por nada de eso. El mundo nos presenta esa variedad que es justamente la riqueza del mundo. Yo estoy convencida que hasta el  humano más excluido, más limitado tiene algo para aportarnos en esta vida.

LA PAREJA: LUCÍA Y PEPE

P: Me viene ahora a la cabeza ese dicho conocido según el cual "las mujeres son de Venus y los hombres de Marte", dándose a entender con ello que hay formas de pensar y encarar las cosas, que suelen ser diametralmente opuestas en los dos sexos..que las mujeres podemos pensar algo y el hombre no va a entender en absoluto ese enfoque. ¿A usted le pasa eso con su esposo?

R: Nosotros hace mucho que vivimos juntos y uno siempre de algún modo se mimetiza. Pero lo que más nos une a nosotros es que tenemos la misma militancia y la misma causa en la vida. Tenemos puntos de vista y modos de ser en alguna cosas totalmente diferentes y nos complementamos. Por ejemplo, yo siempre digo que no he conocido una persona tan desordenada como Pepe y yo soy una persona muy ordenada porque vengo de una familia donde tenía una abuela austríaca que era así, todo tenía que estar perfecto..Entonces creo que lo más lindo en todo es el equilibrio de la vida y eso se puede dar en la política, en la economía, en la convivencia.

P: Tiene razón. Y también en la pareja. ¿Cómo es vuestra historia de amor?

R: Tiene que ver con la lucha porque nos conocimos en la lucha y nos enamoramos en la lucha y seguimos juntos y luchando.

P: ¿No se vieron el tiempo el tiempo que estuvieron presos o más que eso?

R: Nosotros nos hicimos pareja antes de la cárcel y después vino ese largo período que estuvimos presos y tuvimos la enorme suerte- no le pasó a todos los compañeros- de reencontrarnos y seguir como si hubieran pasado cinco minutos ....aunque habían sido  trece años.

P: ¿Cómo se mantiene el amor tanto tiempo? ¿O diría que resurgió? Cuando usted estaba presa, sabía que él también...¿seguía pensando en él?

R: Sí, en algún momento a uno le sirve porque uno se agarra de esas cosas cuando está preso. Pero yo creo que el amor se construye todos los días. No se puede caer en una rutina porque las rutinas son terribles. La burocratización es tremenda y tampoco se puede caer en un supuesto, creo que hay que estar recreando la aventura del amor a diario.

P: ¿Cómo hacen ustedes? Porque uno dice de jovencitos es la pura pasión y de mayores es un amor más profundo, otra cosa..

R: Sí, obviamente que cada etapa de la vida trae una cosa distinta, no hay recetas para esto y cada uno tiene que desplegar su receta. Yo siempre le digo esto a los muchachos jóvenes : primero, la pareja es un equipo, la familia debe ser un equipo y si tú estás dedicado a una causa y tu pareja está en otra cosa, seguramente eso no dure mucho. Entonces lo primero que tenés que hacer es reclutar a tu pareja para la causa porque por ejemplo, la vida del militante y del político no tiene horarios, a veces no tiene sábados ni domingos y eso se soporta o la familia, la pareja lo soporta si se comprende y si se está de acuerdo con la misma causa. Pero si los proyectos no coinciden, entonces hay un momento en que la química, como se dice comúnmente, se termina y no pasa más nada.

P: No es fácil mantener una pareja tantos años al no haber tenido hijos, ¿verdad?

R:  Eso de los hijos no lo vivo como un trauma ni nada. En su momento cuando yo estaba en la etapa de la lucha armada, de la clandestinidad, no me planteé tenerlos porque yo quería tener total libertad, no quería tener ni media atadura. Al fin de cuentas siendo muy joven yo nunca tuve intención de casarme. Me vine a casar de vieja, claudiqué porque Pepe me lo pidió. Me lo planteó y le dije que sí pero después los hijos no vinieron y para mí no es una cosa especialmente traumática porque nosotros vivimos en una quinta, en una chacra en la que hay  cuatro familias que viven con nosotros, como en una pequeña comunidad y esas familias tienen hijos. Así que si quiero disfrutar de un niño no tengo ningún problema.

Creo que la pareja se mantiene porque estamos peleando por lo mismo, por la causa, por eso yo le hago énfasis en eso y bueno, como somos luchadores sociales fundamentalmente, nos vamos a morir luchando así que creo que ese ingrediente de la pareja va a estar siempre.

ENTRE GUERRILLA Y DEMOCRACIA

P: La forma de lucha ha cambiado, por supuesto. De la práctica de la guerrilla a la lucha en democracia es muy diferente. Mirando hacia atrás, ¿cómo lo ve usted? Para quienes estaban en la guerrilla era lo más justo y para otra parte de la ciudadanía fue un gran error que trajo una tragedia al país. Hay diferentes formas de verlo...

R: Mire, estamos hablando de un mundo que no era el de hoy, no estaba globalizado como el de hoy. Era el momento de la guerra fría y se desarrollaron en el mundo muchas luchas de liberación nacional, sobre todo de África. Estaba la guerra de Vietnam y en Latinoamérica, eso impactó sobre la juventud de mi época, impactó el proceso de la revolución cubana porque Latinoamérica tenía muchos dictadores o gobiernos pseudo democráticos y ese proceso relámpago que se dio allí, en esa isla del Caribe impactó sobre Latinoamérica y en esos años en todos los países de Latinoamérica había guerrillas porque la izquierda latinoamericana discutió cuál era la vía para llegar lo antes posible al poder: si la vía era la electoral o era la vía armada y hubo dos posturas y por eso en todos los países había gente de izquierda que peleaba de una manera y gente de izquierda que peleaba de otra. Los designios del imperialismo hicieron que en todos los países se dieran golpes de estado para imponer el neoliberalismo y una cantidad de políticas económicas que fueron bastante nefastas. Ahí  perdimos todos: perdimos los que estábamos con las armas en las manos y perdieron los que estaban en el otro camino .Y nos encontramos en las cárceles y discutimos mucho y bien, en una buena. A la salida, en el Uruguay estábamos en otra coyuntura. En  toda Latinoamérica las guerrillas se desarmaron. LAS FARC son algo distinto. Después, cuando se retorna a la democracia no vuelven,  pero en todos los gobiernos de Latinoamérica hay gente trabajando que estuvo con las armas en la mano. La presidenta de Brasil, el vicepresidente de Bolivia, varios funcionarios en el gobierno de Argentina, en el gobierno de Ecuador, es decir, que la gente entendió y tácitamente y aún los propios cubanos que estaban en otro momento.

Hace poco, comentaba con alguien  que nosotros en aquéllos años de la lucha armada para aprender en la clandestinidad leíamos un libro muy gordo, muy lindo de Menajem Beguin que se llamaba "Rebelión en Tierra Santa".

P: Recuerdo que usted me lo comentó en la entrevista que me concedió hace unos años..y tanto Rosencof como Huidobro también me lo dijeron..

R: Es que ese libro que para nosotros era casi un libro de cabecera porque enseñaba la resistencia contra los ingleses .Leíamos otro libro de un cretense.. y leíamos cosas porque estábamos en ese mundo. Hoy nosotros estamos tratando de construir otra alternativa y hay que ver que Latinoamérica tiene por todos lados gobiernos que han empezado a generar enormes cambios en sus pueblos. Entonces pasa algo que yo creo que ese brasilero genial que es Frei Betto dice: "ahora la gente elige presidentes con cara de gente". Bueno, ese cambio hizo que nosotros también estuviéramos ,porque no somos irracionales. Nadie ama vivir en guerra ,  todos amamos vivir en paz. A veces la historia, las circunstancias nos pegan de tal manera que no tenemos otra alternativa, entonces si encontramos un camino lo tenemos que cuidar.

P: ¿Cree que en la guerrilla a la mujer le era especialmente difícil?

R: Y... la mujer que estaba totalmente libre como era mi caso y estaba convencida de lo que hacía, tenía las misma dificultades que un varón, ahí no había diferencia. La mujer que tenía hijos, sí. Yo creo que era bastante difícil porque además en el momento que era detenida tenía una presión de parte de los represores muy grande con esos hijos.

P: ¿Usted sintió un ensañamiento, una humillación especial como mujer estando presa?

R: Ahora hay muchas mujeres en las Fuerzas Armadas pero en esos años eran totalmente masculinas y entonces había como un desprecio. Pero no solamente se expresaba contra las mujeres, se expresaba también por razones raciales y se expresaba sobre todo por razones ideológicas. Yo recuerdo bien una compañera de celda que tuve que era negra y le reprochaban que además de ser militante política fuera negra. La discriminaban también por eso: mujer, negra y militante política ya era lo último. Yo estuve también con muchas compañeras y otros compañeros míos judíos como Rosencof que los hostigaban por eso, porque muchos asumían la filosofía de los nazis por momentos, metían todo en el paquete.

P: En varias entrevistas que realicé de cara a los 40 años del golpe, en el marco de una cobertura especial sobre la fecha, algunas mujeres judías que habían estado presas me hablaron claramente que sufrían más por ser judías precisamente. Recuerdo en especial la frase de una de ellas que me dijo: "Sabía cuando me iban a torturar, porque me llamaban ´vení, judía de mierda´"...

R: Sin duda, eso se dio así. Hubo también cuestiones raciales, cuestiones de género, había un deprecio generalizado. Son las cosas que pasan en los momentos de las dictaduras , etapa de la que por suerte los pueblos latinoamericanos pudimos salir .

Y las mujeres tuvieron mucho que ver porque la resistencia, por lo menos en Uruguay y en Argentina que es donde lo tengo más claro, estuvo llevada en hombros de las mujeres. Lo que hicieron las madres, tanto las madres argentinas como las uruguayas por sus hijos presos o desaparecidos ,no está escrito. Las mujeres lucharon desafiando a ese poder militar. Se estacionaban en los cuarteles, peleaban por los hijos y algunas también fueron castigadas por esa razón. Quiero decir que ahí la mujer jugó un papel. En la cárcel las llamábamos fraternalmente "las gordas" porque muchas eran gordas, maravillosas, porque nosotros las veíamos pelear con los militares para podernos alcanzar un paquete con fruta o alguna cosa y siempre eran las madres. Capaz que hemos sido poco agradecidos en dar visibilidad a ese tema, pero esas fueron mujeres uruguayas que se pusieron en defensa de la democracia y en defensa de sus hijos.

UNA MUJER FELIZ... Y CON PLANES DE FUTURO.

P: Cuando asumió este gobierno con su esposo al frente y usted como la senadora más votada, a veces se escuchaba el comentario: Lucía es todavía más fuerte que el Pepe. ¿Usted se siente una mujer fuerte?

R: Sí, a mí me han puesto esa característica, yo lo sé. Es que yo cuando estoy convencida de algo y prendo el tractor voy para adelante. Ahora, en el trato diario, en la convivencia yo tengo buena relación con todos los legisladores de la oposición.

P: Ser fuerte no supone falta de respeto por el adversario...

R: Exactamente y yo no tengo ningún problema, si hay algo que propone la oposición y me parece que le sirve al país, a mí no me duelen prendas.Entonces yo puedo parecer tajante porque a veces tengo una forma de expresarme de ese tipo pero no soy ni tan poderosa ni tan mala.

P: ¿Se siente una mujer feliz, realizada?

R: Yo a mi modo soy feliz, sí ,porque he hecho en la vida lo que he querido, en el acierto o en el error. Tengo 69 años y creo que no los he vivido al santo botón.

P: Su esposo dijo una vez algo así como que los años no vienen sólo para que a uno le vengan canas, como dando a entender que cuando uno ya es una persona madura ve las cosas diferentes, habiendo aprendido. A los 69 jóvenes años que usted tiene, tan llenos de energía ¿ piensa que hay cosas en la vida que le hubiera gustado hacer en forma diferente?

R: Cuando yo arranqué a la vida quería ser arquitecta y hasta el día de hoy me gusta la arquitectura. Y creo que si la circunstancia hubiera sido otras, hubiera disfrutado siendo arquitecta.Pero  las circunstancias me pusieron bifurcaciones en el camino y yo opté en libertad, entonces no me quejo. Yo tengo en mi biblioteca un espacio dedicado a la arquitectura y siempre estoy tratando de leer, de interiorizarme y de enterarme el hoy porque son materias vivas que van cambiando.Pero en los años de cárcel  en que uno para sobrevivir tenía que estudiar o leer lo que le cayera en las manos,  descubrí el mundo de la biología que me parecía apasionante y no lo conocía en profundidad hasta que me metí en él... un poco obligadamente ...pero me pareció fascinante.

Con el diario del lunes es muy fácil decir algunas cosas pero no, yo podría haber sido otras cosas. Uno pertenece a una época, pertenece a un momento histórico y yo creo que soy bastante representante de lo que era la juventud uruguaya de la época por eso me parece lógico todo lo que fue mi peripecia.

P: Parte de la lucha por la justicia social usted comparte con su esposo, los une. Como se dice en el judaísmo, "hasta los 120"..Lucía..¿ tiene algún sueño, como mujer en especial ,por cumplir?

R: Estoy con la cabeza lúcida, ojalá a los 120. Tengo muchos sueños todavía. Creo que nosotros venimos haciendo una obra muy trabajosa de reconstrucción de país y la parte más trabajosa es el cambio cultural porque uno puede cambiar la economía, cambiar la industria, cambiar la tecnología, pero cambiar la cabeza de la gente culturalmente, que la cabeza de la gente avance es la tarea más complicada. Yo creo que en eso tengo todo un horizonte enorme por delante en el que voy a seguir peleando y en distintos momentos en el lugar que me toque.

Yo no soy una persona que esté atornillada al asiento en el que estoy, porque yo tuve mucha militancia barrial en mi vida también. Y bueno....el Presidente tiene pensado cuando termine, y ése es un proyecto de los dos, hacer en nuestra casa una escuela agraria. Tenemos todo el proyecto, lo que pasa es que ahora no tenemos tiempo pero cuando venga el tiempo ése, es un proyecto que como justamente nosotros no tenemos hijos, queremos que esta construcción que hemos hecho de esta quinta con todas las cosas que le hemos puesto arriba y el trabajo quede para el barrio, quede para la sociedad, quede para que algunos niños y algunas niñas puedan aprender los oficios agrarios porque la comida es muy importante en la vida del hombre.

P: Esto me lleva a preguntarle cómo es su plan para después de marzo del año próximo..¿Cómo ve vuestra vida?

R: Yo soy una mujer del partido y como mi partido quiere que siga un período más, voy a tener un período más de lucha parlamentaria en el Senado o en la Vicepresidencia de la República, según lo que decida la fuerza política.

P: ¿Le gustaría ser vicepresidente de Tabaré?

R: No es un problema de gustos, es un problema de si el partido me necesita y cree que tengo las aptitudes, es un problema de entrega, de compromiso. Yo ya he ejercido la vicepresidencia porque cuando Danilo Astori está de licencia o tiene que suplir al Presidente yo he estado ahí. Lo mismo en otras tres oportunidades que he estado en la presidencia pero son tareas, yo siempre lo tomo como tareas militantes, como compromisos. Hay una cantidad de gente que le está planteando a Pepe la necesidad de otra tareas, sobre todo en el marco internacional porque ha desarrollado un posicionamiento del país muy fuerte en el mundo y la idea es, entre otras cosas, llevar adelante la escuela pero en el camino de la vida muchas veces se cruzan imponderables. Es muy difícil planificar. Yo a veces admiro a esos pueblos como los neozelandeses que tienen todo planificadito y ordenado pero también un día un neozelandés me dijo: sí pero no tenemos aventura como ustedes. Así que somos más latinos de cabeza y menos sajones, pero bueno, por ahí estarán las cosas..

P: ¿Usted también cree que Tabaré es la mejor opción para el país? Porque por el hecho que haya una candidata mujer no quiere decir que todas las mujeres tienen que apoyarla a ella..¿no? Su esposo dejó claro en público su preferencia por  Tabaré y Constanza Moreira reaccionó molesta...y se la puede comprender...

R:  Nosotros habíamos definido hacía pila que íbamos a apoyar a Tabaré Vázquez. No tengo nada contra Constanza, es una buena compañera pero hace muy poquito que está en política. Nosotros tenemos que dar una lucha dura por la presidencia .Entonces es más seguro ese paso y en esos cinco años, ahí sí. Nosotros tenemos que desarrollar y proyectar sí o sí, toda una generación de recambio en el Frente Amplio y hay muchos nombres y uno de ellos es el de Constanza Moreira, pero no para esta instancia.

"NO SE ACHIQUEN"

P: Como mujer exitosa en lo que ha tomado como sus opciones de vida, ¿hay algún consejo que quiera hacerle llegar a la mujer uruguaya de cara a la fecha simbólica que es el Día internacional de la Mujer?

R: Yo les diría que no se achiquen, que se liberen de algunas ataduras o de roles predeterminados que se nos imponen y vivan lo que quieren vivir. Todos queremos vivir cosas diferentes, pero que cada uno viva a pleno lo que pueda vivir y luche por eso, que no se queden quietas porque lo peor es resignarse a un destino porque nos da seguridad, por esto o por lo otro, porque allí no se encuentra la felicidad.

Mujer
2014-02-28T11:05:00

UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias