UY Press - Agencia uruguaya de noticias

08.10.2015

MONTEVIDEO (Uypress) – Al principio fueron solo 50 cámaras GoPro. Se usaron en un plan piloto para registro de pruebas y evaluación de operativos. Hoy estas cámaras están incorporadas a la policía y son de uso frecuente según los protocolos definidos.

El Comisario Inspector Alfredo Clavijo, Jefe de la Zona Operacional 5 de Montevideo, destacó la transformación y el uso de tecnología que hacen parte principal de esta nueva policía, la Policía del siglo XXI.

Tres pilares fundamentales forman parte de este cambio a través de un pensamiento que se ha inculcado a toda la policía, desde el Jefe hasta el Policía que se encuentra en la calle en contacto con la población. Estos son: 1 - principios fundamentales basados en el apego a las normas en cada acción; 2 - evidencia criminal apoyada en el análisis de los delitos para optimizar los recursos y, por último, 3 - el uso de la tecnología.

Jefatura de Montevideo posee más de 80 unidades de cámaras personales que se utilizan para el patrullaje y otras tareas específicas. En principio estaba prevista su incorporación en los patrulleros y luego, tras un asesoramiento internacional, se decidió que sería mejor utilizarlas en la persona con un arnés.

El uso de las GoPro -regulado bajo un protocolo que se está ajustando- comprobó y demostró que ha habido una aceptación por parte del efectivo policial, circunstancia que lo ha llevado al apego a sus principios y a las normas, con la garantía adicional que brindan las imágenes. También confirman el trabajo en equipo -en forma profesional- bajo una buena disciplina operativa con la firmeza necesaria para hacer respetar los derechos de las personas, cuando otros los quieren vulnerar. 

Las cámaras personales se empezaron a usar por primera vez como prueba piloto para dos tareas: en la Dirección de Información Táctica para filmar las intervenciones o vigilancias; y, en el Grupo de Reserva Táctica (GRT),  para registrar los operativos de fútbol, básquetbol, allanamientos y otros en los que fuera necesario el registro.

Pero, también se las utilizó con una función didáctica; luego de cada operativo, el oficial a cargo y los líderes de grupo, podían analizar su actuación en un operativo, repasar cómo se realizó, (qué se hizo bien y en qué se falló), para corregir y mejorar procedimientos.

Clavijo expresó que "la perfección es una utopía, pero la tenemos que pretender siempre; los errores siempre son corregibles, donde no nos podemos equivocar es en el cumplimiento de la ley, eso no podemos permitirlo nunca".