“Tendremos en marcha la solución estructural”
Ortuño sobre cancelación de Neptuno: “Decisión de política pública con sustento técnico basado en evidencia científica”
05.08.2025
MONTEVIDEO (Uypress)- Durante la comparecencia ante la Comisión de Ambiente de Diputados, el ministro de Ambiente, Edgardo Ortuño, y el presidente de OSE, Pablo Ferreri, defendieron la reciente decisión del gobierno de suspender la construcción del proyecto Neptuno, que preveía una planta potabilizadora en Arazatí (San José).
En su lugar, anunciaron un paquete de obras con una inversión estimada de 350 millones de dólares que, según el gobierno, garantizará el abastecimiento de agua potable para el área metropolitana y la Costa de Oro hasta el año 2045.
"Es una decisión de política pública con fuerte sustento técnico basado en evidencia científica y, lo más importante, basado en la experiencia que hemos vivido todas las uruguayas y los uruguayos", afirmó Ortuño en rueda de prensa durante un cuarto intermedio, en referencia a la crisis hídrica de 2023, que dejó sin agua potable a buena parte de la población durante más de dos meses.
La propuesta del Ejecutivo contempla tres ejes principales: la construcción de una represa en Casupá, una nueva planta potabilizadora en la zona de Aguas Corrientes, y una reserva de agua en el arroyo Solís Chico.
"Estamos hablando de una inversión de 350 millones de dólares aproximadamente", confirmó Ortuño, quien además aseguró que esta cifra representa un ahorro en comparación con el proyecto cancelado.
"El proyecto Neptuno implicaba la construcción de una planta de agua potable de 200.000 metros cúbicos en la zona de Arazatí, y esta obra tenía un costo de 294 millones de dólares", explicó Ferreri y añadió que "para poder volcar los 200.000 metros cúbicos que producía esta planta al sistema metropolitano, requería obras adicionales por unos 70 millones de dólares".
Con la renegociación, se está "generando un conjunto de obras por unos 350 millones de dólares, pero allí incluye la construcción de Casupá", ahondó Ferreri, quien adicionó que estas obras permiten no solo una mayor eficiencia económica y operativa, sino también resolver el suministro en zonas actualmente no cubiertas, como algunos balnearios del este de Canelones.
Ambos jerarcas insistieron en que la decisión está respaldada por décadas de estudios y asesoramientos técnicos, tanto nacionales como internacionales. "Hoy hicimos una descripción somera de todos los estudios que se han hecho a través de OSE o contratados por OSE desde el año 70", subrayó el presidente del ente y agregó que este "conjunto de obras que van a asegurar el suministro del agua potable a la zona metropolitana de aquí al 2045".
Uno de los argumentos centrales contra el proyecto Neptuno es su vulnerabilidad frente a eventos de sequía, dado su emplazamiento en una zona con riesgos de salinidad, lo que generaría que haya "un número importante de días sin poder operar debido a la salinidad", explicó Ferreri. A eso se suma el costo operativo de bombear agua por 80 kilómetros, y el riesgo sanitario derivado de la ozonización en presencia de bromuro.
Consultado sobre el eventual sobrecosto de la represa de Casupá, el ministro aseguró que un estudio externo encargado por la CAF validó el presupuesto en 130 millones de dólares, por lo que le han dado "garantía y seguridad" de que "los montos van a estar dentro del orden de de lo que está presupuestado".
Ferreri complementó que esa cifra incluye todos los componentes del proyecto: "No solo incluyen la construcción de la planta sino también incluyen las expropiaciones, la dirección de la obra, el proyecto ejecutivo y hay una partida destinada a los costos ambientales".
Ortuño explicó que, en caso de repetirse una situación de sequía extrema como la de 2023, el país estará mejor preparado: "Tendremos en marcha la solución estructural de fondo, que es la construcción de una reserva de agua bruta, de agua dulce, que impida que los uruguayos volvamos a tener agua salada en las canillas".
El ministro insistió en la necesidad de que el país adopte políticas de Estado en torno al agua potable. "Los temas vinculados al agua potable tienen que ver con asegurar un derecho humano fundamental a la población", expresó, al tiempo que señaló: "ojalá podamos construir más allá de las diferencias políticas, con un debate y un intercambio con altura basado en evidencia científica".
Los cuestionamientos de la oposición
Desde la oposición, los legisladores de la coalición que integran la Comisión de Ambiente expresaron su profunda preocupación tras la exposición de las autoridades del Ministerio de Ambiente y de OSE.
"Nos quedamos con más dudas que certezas", aseguró el diputado nacionalista Sergio Valverde, quien también advirtió sobre la saturación histórica de la cuenca del Santa Lucía.
Por su parte, el colorado Walter Cervini afirmó que la presentación deja "bien claro" que la suspensión de Neptuno "fue una decisión política del Gobierno", a la vez que añadió que "no aportaron ni un solo elemento técnico" que les permita "reflexionar sobre la decisión que tomaron".
El diputado nacionalista Juan Martín Rodríguez, criticó que el ministro "nada dice respecto a la solución que hubiese significado la toma de agua del Río de la Plata para los vecinos de Ciudad del Plata, Libertad y las zonas aledañas".
Acerca de la salinidad del Río de la Plata, la diputada Elianne Castro, también del Partido Colorado, sostuvo que es "en base a modelos y análisis estadístico" que se concluye que "podría llegar a haber 90 días de salinidad en el Río de la Plata, pero son modelos, no es una realidad". En tal sentido, agregó que "la idea sería basarse en los datos reales y poder seguir adelante con el proyecto Neptuno.
Foto: @MAmbienteuy
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias