DeepSeek cumple 6 meses y ya controla la vida de millones de ciudadanos: Su presencia asusta y asombra a partes iguales
23.08.2025
BEIJING (Uypress)- En apenas seis meses, DeepSeek pasó de ser un experimento local a convertirse en una de las inteligencias artificiales más influyentes y controvertidas del planeta. En China, donde nació, su despliegue fue fulgurante, al punto de controlar el país. Un país que, por cierto, ya está dando el salto a la robótica de consumo, según informan portales especializados.
La policía de Shenzhen, epicentro tecnológico del gigante asiático, ya lo utiliza para rastrear millones de grabaciones de cámaras de seguridad y localizar a fugitivos o personas desaparecidas. Uno de los casos más sonados fue la captura de una mujer prófuga desde hacía quince años, vinculada a una trama de bebés robados, que fue identificada en medio de un espectáculo de drones gracias al reconocimiento facial y al poder de análisis de DeepSeek.
Pero la policía no ha sido la única en subirse al carro. En los tribunales de Pekín, jueces y funcionarios ya redactan sentencias con su ayuda en cuestión de segundos, mientras que en hospitales de Fuzhou se emplea para traducir diagnósticos médicos en un lenguaje accesible para los pacientes. Las aplicaciones se extienden a departamentos de tráfico, líneas de atención ciudadana e incluso a tribunales de divorcio, donde DeepSeek se ha convertido en un auxiliar inesperado.
La expansión de esta herramienta no puede entenderse sin el apoyo político. Liang Wenfeng, fundador de la startup homónima, fue bendecido públicamente por Xi Jinping en una cumbre con los grandes magnates tecnológicos del país, entre ellos Jack Ma y Ren Zhengfei. Esa fotografía oficial, casi una estampilla de legitimidad, abrió las puertas de la burocracia china a un modelo que, pese a su potencia, sigue sometido a los férreos límites de la censura estatal.
El impacto también se siente en la industria. Grandes empresas como Alibaba, ByteDance, Tencent o Huawei han integrado la tecnología en sus servicios, mientras fabricantes de automóviles como BYD ya experimentan con ella en sus vehículos eléctricos. Incluso Nvidia, con su fundador Jensen Huang a la cabeza, ha elogiado el avance chino en IA de código abierto, subrayando su relevancia para el progreso global.
Sin embargo, el éxito de DeepSeek despierta recelos fuera de sus fronteras. Países como Australia, Corea del Sur, Italia o la República Checa han prohibido su uso en instituciones públicas, alertando del riesgo de que los datos de los ciudadanos terminen en manos de Pekín. Entre la fascinación tecnológica y el miedo geopolítico, DeepSeek se ha convertido en el mejor reflejo de cómo la inteligencia artificial ya no es solo una carrera científica, sino también un pulso por el poder mundial.
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias