“Profunda preocupación”
Docentes jubilados expresan “disconformidad con la falta de ética de las autoridades que expresan una cosa y hacen otra”
17.10.2022
MONTEVIDEO (Uypress) – El Colectivo de Docentes Jubilados de la Educación Pública dio a conocer un comunicado donde manifiestan “desconformidad con la falta de ética de las autoridades” y su “profunda preocupación” con el denominado proceso de “Transformación de la Educación” que lleva adelante el gobierno.
En un comunicado a la opinión pública, el Colectivo de Docentes Jubilados de la Educación Pública se refirió a varios puntos de la reforma de la educación que propicia el gobierno, y manifestó su postura crítica con actitudes y declaraciones de autoridades, algunas de las cuales "generan alarma", como el caso de las recientes expresiones de la Dra. Adriana Aristimuño, directora de Planificación Educativa de ANEP, que expresó en entrevista con la televisión "que los colegios privados pidieron un año de prórroga para aplicar la reforma y se les concede".
Los profesores jubilados también manifestaron su desacuerdo con la titulación universitaria de docentes "como sustitución de la real formación y profesionalización en una Universidad de la Educación".
A seguir el texto completo del comunicado
Como docentes jubilados de la Educación Pública hemos transitado nuestra vida atravesados por esta profesión y su dedicación, por ello no podemos permanecer en silencio cuando vemos con profunda preocupación los avances del proceso denominado "Transformación de la educación" que llevan adelante las actuales autoridades educativas.
Nos dirigimos a la opinión pública para expresar:
1- Reiteramos nuestro compromiso con la defensa de la Educación Pública frente a una reforma que se intenta imponer sin los espacios de consulta y participación democrática imprescindibles.
2- Sostenemos nuestro desacuerdo con la Titulación Universitaria de docentes como sustitución de la real formación y profesionalización en una Universidad de la Educación.
3- Afirmamos que cualquier reforma auténtica de la educación sólo se haría posible invirtiendo recursos en ella, como lo demuestran múltiples ejemplos en el mundo. El actual recorte presupuestal no sólo afecta negativamente a lo ya existente, sino que impedirá llevar adelante cambios reales si se propone la mejora de la educación.
4- Nuestro rechazo al desmantelamiento de experiencias educativas y programas que estaban funcionando bien provocando la discontinuidad de procesos de construcción de alternativas en los que muchos docentes y estudiantes invirtieron su tiempo. Rechazamos también la sustitución de nombres de distintos dispositivos educativos con el objetivo de presentarlos como novedad.
5- Nuestra desazón al ver cómo instancias que nacieron como una forma de discutir el destino de la educación entre todos los educadores (Asambleas Técnicas de Docentes, ATD) se minimizan a tribunas para obtener el visto bueno a documentos discutidos en otras esferas y que incluso contienen plagios y no registran adecuadamente sus fuentes. Las ATD de todos los sub-sistemas de la ANEP expresaron sus reclamos al respecto, conscientes que los docentes deben ser considerados constructores y no solo aplicadores.
6- Nuestra disconformidad con la falta de ética de las autoridades que expresan una cosa y hacen otra, incluso en extensas declaraciones sobre sus objetivos. Por ejemplo, genera alarma las declaraciones públicas de la Dra. Adriana Aristimuño, Directora de Planificación Educativa de ANEP, quien expresaba en entrevista televisiva que los colegios privados pidieron un año de prórroga para aplicar la reforma y se les concede. Se toma en cuenta que pueden considerar que no estar preparados para llevar adelante los cambios y porque puede haber despidos en planta docente que les afectaría económicamente. Estas consideraciones no parecen valer para la Educación Pública según estas autoridades que siguen sometiéndola a la improvisación y a la arrogancia.
7- Nuestra preocupación al ver cómo la persecución a docentes sindicalizados, a ex-jerarcas de la educación y a estudiantes, así como también una cultura de la competencia y la vigilancia que pretende sustituir el diálogo y la colaboración en los centros, han venido conformando un clima tenso, de temor, que recuerda a otras épocas en la educación, y que para nada favorecen la reflexión, el intercambio y la generación de proyectos para el futuro.
Colectivo de Docentes Jubilados de la Educación Pública
Imagen: adhocFOTOS/Daniel Rodríguez
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias