Reparar el mundo

Falleció el rabino Israel Seymour Dresner, compañero de batallas de Martin Luther King

14.02.2022

MONTEVIDEO (Uypress/por Ernesto Kreimerman) – Hace apenas unos días, el pasado 13 de enero, a la edad de 92 años falleció Israel Seymour Dresner, un rabino reformista, militante de Habonim Dror, y entrañable amigo de uno de los hombres más importante en la lucha por los derechos civiles en los Estados Unidos, Martin Luther King Jr.

 

Fue líder de una organización judía estadounidense por la paz, la justicia, el pluralismo y la democracia, Partners for Progressive Israel, durante un cuarto de siglo, siendo su presidente durante los años 90. Ha sido miembro de J Street (grupo de más de mil rabinos y religiosos, proisraelí y por la paz) desde su fundación. También fue elegido en repetidas ocasiones delegado al Congreso Sionista Mundial.

Dresner, que nació en el seno de una familia ortodoxa, ya a los 13 años encaminó su compromiso juvenil judío en el movimiento Habonim Dror, y se transformó en uno de sus referentes. Aquel quiebre fue el inicio de una constante en su vida, de compromiso y de acción, que le valdrían un amplio reconocimiento, como el que le dio el presidente Barack Obama cuando, al cumplirse cincuenta años de la Marcha a Washington, le honró la noche previa en la Casa Blanca.

Dror

Para Habonim Dror, el rabino Dresner es "un líder moral del pueblo judío". Cuando los médicos le advirtieron en noviembre último que su cáncer de colon solo le dejaría vivir unas semanas más, una preocupación le asaltó hasta sus últimos momentos. Les dijo a sus hijos, Tamar y Avi, y a sus más allegados, que no debía morir antes del 6 de enero, aniversario de los disturbios trumpistas en el Capitolio. Les confesó que quería ver que la democracia había sobrevivido un año completo. Dresner estaba muy enfermo desde hacía algún tiempo, pero aún así su sentido de la responsabilidad cívica lo conmovía.

Siendo un joven dirigente de HD, a la edad de 18 años, fue arrestado por primera vez bajo el cargo de desobediencia civil. Era el año 1947 y aquel inquieto muchacho se unía a una protesta en la ciudad de New York en apoyo a los refugiados judíos a bordo del barco Éxodo. Casi 70 años después, tras una larga historia de reivindicaciones y movilizaciones siempre defendiendo derechos civiles y democráticos, participaría de la última protesta pública que su agotado físico le permitió, cuando asumió Donald Trump la presidencia. Ironías del destino, la preocupación por la amenaza que Trump significó para la democracia estadounidense lo acompañó hasta sus últimos momentos.

Siete décadas

Aquellos inicios marcaron la vida de Seymour. Fueron siete décadas de intensa participación, destacando el papel que jugó en los años sesenta a favor de la igualdad racial. En aquellos días, el rabino Dresner se convirtió, como él mismo solía ironizar, en el rabino más arrestado de los Estados Unidos. Como parte de los Viajeros de la Libertad, Freedom Rider, en 1961 marchó protestando por la segregación del tránsito interestatal. Fue destacado participante de los eventos previos y de la propia Marcha en Washington de 1963, así como de las marchas de Selma a Montgomery de 1965. Pero Dresner no era un aventurero y estaba convencido de que lo importante era sumar, y por ello puso esfuerzo a esa labor y persuadió a otros religiosos, no solo rabinos sino también clérigos blancos, a sumarse a la causa de los derechos civiles. Por su destacada labor, Martin Luther King escribió que Seymour "hizo mucho para plantear las cuestiones morales y religiosas correctas" de su tiempo.

Judío de dimensión planetaria

En los años sesenta, muchos líderes y activistas judíos ocuparon destacados roles en los movimientos por los derechos civiles, no solo en los Estados Unidos, sino en el mundo. Entre ellos destaca el rabino Dresner y el teólogo Abraham Joshua Heschel.

La amistad del rabino Dresner con M. L. King comenzó en 1962, cuando compartieron celda en una cárcel de Albany, Georgia, arrestados por desobediencia civil. Cuenta la leyenda de aquellos años que, al verse y reconocerse, a través de los barrotes, se saludaron con un intenso apretón de manos. King, para que los guardias no pudieran escuchar esa conversación, pidió a quienes los rodeaban que empezaran a cantar. Allí acordaron, se sabría después, que el rabino Dresner acompañaría a King a través de Georgia, compartiendo púlpito. En más de una ocasión, y ante amenazas de grupos racistas, el rabino Dresner intercedió con especial valentía para proteger la integridad física de King.

La agenda de los intensos años sesenta absorbió a Dresner. No solo sumándose a organizaciones de alcance nacional, sino él mismo promoviendo significativos hechos políticos. Por ejemplo, en San Agustín en 1964, junto a otros 15 rabinos protestando contra la segregación. Fueron arrestados e inmediatamente después circuló una carta suya que en su parte central decía: "Vinimos como judíos que recuerdan a los millones de personas sin rostro que permanecieron en silencio, viendo cómo se elevaba el humo de los crematorios de Hitler... Vinimos porque sabemos que, después del silencio, el mayor peligro para el hombre es la pérdida de la fe en la capacidad del hombre para actuar".

Como King, Dresner no se limitó a manifestarse en pro de los derechos civiles y democráticos. Fue más allá. Se opuso activamente a la guerra de Vietnam, se movilizó en favor de los judíos soviéticos y luchó denodadamente para poner fin al régimen segregacionista del apartheid en Sudáfrica. Cobró especial notoriedad una protesta frente al consulado de Sudáfrica en NY, en 1980, cuando una vez más fue arrestado.

Fue, también, un activo defensor de los derechos LGTBQ, tanto en los Estados Unidos como en Israel.

Israel...

El vínculo del rabino con Israel fue absoluto. Y su involucramiento, en consecuencia, fue intenso. Desde 1951 viajó a Israel en más de 40 ocasiones, con algunas estadías extensas.

Apoyó las políticas de los ex primeros ministros israelíes Rabin, Peres, Barak y Olmert, y ex ministros israelíes como Yossi Sarid, Yossi Beilin y Tzipi Livni, al tiempo que fue un crítico del gobierno de Netanyahu y participó activamente en el movimiento por la paz en Israel. Fue presidente del Fondo de Educación para los Derechos Civiles y la Paz de Israel, ahora Socios del Israel Progresista.

Fue uno de los primeros rabinos en oponerse a las políticas israelíes que defendían la anexión de los territorios palestinos ocupados por Israel durante la Guerra de los Seis Días, en 1967. Se ha opuesto al movimiento de colonos desde sus inicios en 1968. Y en ello coincidió con varios de los nueve presidentes estadounidenses que han ejercido la conducción del gobierno desde entonces.

Dresner destacó por su prudencia, comprendiendo la complejidad histórica y política, la dimensión de los intereses en juego, y en todo momento promovió la necesidad de un acuerdo de paz con los palestinos para una solución de dos Estados. Pero no escapaban a su preocupación, otras condiciones del conflicto en su dimensión regional y global.

A los 92 años...

Seymour fue un hombre de compromiso, un rabino involucrado con los principios del judaísmo y de la democracia. Nunca más cierto aquello de que "nada de lo humano le ha sido ajeno". Desde los 13 años, umbral de edad significativo para los judíos, hasta su muerte, a los 92, el rabino Dresner dedicó su vida a "reparar el mundo", su tikún olam, ese mandato de justicia social, de su contribución a la forja de un mundo mejor.

Desde mediados del siglo XX, el sentido contemporáneo se alinea con el concepto rabínico de "mipnei tikkun ha-olam" y resume una preocupación por la política pública y el cambio social, que se asocia a la noción cabalística de "tikún", de que el mundo está hondamente roto y que únicamente puede ser reparado, transformado, por la decisión proactiva, colectiva y no individual, de repararlo para mejor.

Su última preocupación fue estar vivo para ver la democracia estadounidense reconstituida al cumplirse, hace pocos días, un año del ataque al Capitolio. Lo vio. Unos días después, el 13 de enero, el rabino Dresner dejaba de existir. Días antes de su muerte había dicho apesadumbradamente: "Me siento un poco culpable; dejar el mundo actual donde las fuerzas del odio y la discriminación parecen estar en aumento y la democracia parece estar en peligro".

 

Imagen: Dresner con Martin Luther King


Derechos Humanos
2022-02-14T11:30:00

UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias