SALVEMOS AL PLANETA
Porno ecológico
30.05.2011
NORUEGA, 30 May (UYPRESS) - Un grupo de amantes de la naturaleza hacen videos eróticos para ayudar a diferentes comunidades. Sostienen que salvar el planeta es sexy.
Sexo, orgías y pornografía para defender el medio ambiente. Para Leona Johansson y Tommy Hol Ellingsen, es una forma de activismo. "¡Salvar el planeta es sexy! ¿Por qué no excitarse por una buena causa?", argumentan.
Si el porno y la ecología parecían mundos ajenos, esta pareja de noruegos amantes de la naturaleza y el amor libre crearon un proyecto que aparea ambas causas.
"Fuck for forest" (sexo para los bosques) se define como una organización ecológica y erótica sin fines de lucro. El objetivo es "liberar nuestras mentes, estar más en contacto con la naturaleza, con nosotros mismos y con el planeta", le explica Ellingsen.
Desde su fundación hasta el momento, han recaudado más de US$ 345.000 a través de la contribución de internautas que contribuyen para ver los contenidos de su página web: fotos y videos de sexo explícito cuyos escenarios suelen ser al aire libre. Los interesados también pueden donar sus fotos y videos para que sean publicados en la página.
Desde que empezaron, a principios de la década del 2000, tienen más de 1.300 activistas en todo el mundo. Saltaron a la fama en 2004 cuando Johansson y Ellingsen copularon en vivo en el escenario durante un concierto de rock en Noruega.
La iniciativa no fue bien recibida por varias organizaciones ecologistas que se negaron a recibir donaciones de FFF. La más notoria es el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), que no quiso aceptar dinero de ellos. "Estamos a favor del amor y la biología, pero no nos gustó esta versión y no queremos estar asociados a ella".
"Procuramos no aceptar dinero de los negocios o empresas que tienen actividades dentro de la industria de armas y material de guerra, el alcohol, el tabaco, la pornografía y la explotación de combustibles fósiles", agregan.
Por su parte, la pequeña organización Arbofilia, de Costa Rica, que se dedica a comprar tierras selváticas para reforestarlas, empezó a trabajar con ellos pero luego tomó distancia pues, según su presidente, comprometía su imagen de consultora.
El "porno ecológico" se encuentra con resistencias y controversias, más allá de su nuevo significado.
Si el porno y la ecología parecían mundos ajenos, esta pareja de noruegos amantes de la naturaleza y el amor libre crearon un proyecto que aparea ambas causas.
"Fuck for forest" (sexo para los bosques) se define como una organización ecológica y erótica sin fines de lucro. El objetivo es "liberar nuestras mentes, estar más en contacto con la naturaleza, con nosotros mismos y con el planeta", le explica Ellingsen.
Desde su fundación hasta el momento, han recaudado más de US$ 345.000 a través de la contribución de internautas que contribuyen para ver los contenidos de su página web: fotos y videos de sexo explícito cuyos escenarios suelen ser al aire libre. Los interesados también pueden donar sus fotos y videos para que sean publicados en la página.
Desde que empezaron, a principios de la década del 2000, tienen más de 1.300 activistas en todo el mundo. Saltaron a la fama en 2004 cuando Johansson y Ellingsen copularon en vivo en el escenario durante un concierto de rock en Noruega.
La iniciativa no fue bien recibida por varias organizaciones ecologistas que se negaron a recibir donaciones de FFF. La más notoria es el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), que no quiso aceptar dinero de ellos. "Estamos a favor del amor y la biología, pero no nos gustó esta versión y no queremos estar asociados a ella".
"Procuramos no aceptar dinero de los negocios o empresas que tienen actividades dentro de la industria de armas y material de guerra, el alcohol, el tabaco, la pornografía y la explotación de combustibles fósiles", agregan.
Por su parte, la pequeña organización Arbofilia, de Costa Rica, que se dedica a comprar tierras selváticas para reforestarlas, empezó a trabajar con ellos pero luego tomó distancia pues, según su presidente, comprometía su imagen de consultora.
El "porno ecológico" se encuentra con resistencias y controversias, más allá de su nuevo significado.
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias