Línea clara
Fito & Fitipaldis en Montevideo
18.04.2015
MONTEVIDEO (Uypress/Carolina Bello) - En el marco de su gira por Latinoamérica, el jueves 16 de abril la banda española Fito & Fitipaldis se presentó en la Trastienda de Montevideo con entradas agotadas. Un show generoso de dos horas y media sin interrupciones, con un público comprometido, que consolida la popularidad internacional del grupo.
Fito & Fitipaldis surgió en 1998 a instancias de Adolfo "Fito" Cabrales, por entonces alma máter de Platero y Tú, banda vasca con influencias de AC/DC o de los españoles Leño, cuyas letras no se abocaban particularmente a las inquietudes sociales del boom vasco de los ochenta, sino que apuntaban a los clichés del género como los bares, el desamor y las drogas.
Platero y Tú se disolvió en 2001, cuando Fito & Fitipaldis comenzaba a afianzarse. Por entonces editaba su segundo disco Los sueños locos (2006) –el primero había sido A puertas cerradas (1998), que incluye canciones emblemáticas de la banda como "Rojitas las orejas", pedida por el público durante todo el show, aunque no la tocaron– que colocó a la banda con influencias del rockabilly, swing y del jazz, en las primeras planas de la popularidad del rock español.
Posteriormente llegarían las actuaciones como teloneros de Extremoduro, banda colega por contigüidad de inquietudes, que los dio a conocer entre su público y contribuyó a seguir engrosando su popularidad. Quizás como un guiño a la inminente presentación de Fito & Fitipaldis en Uruguay, la última canción que sonó en la previa del show que Extremoduro dio en diciembre de 2014 en el Teatro de Verano fue "Al Cantar", tema emblemático de Platero y Tú en el que colabora Robe Iniesta, vocalista y compositor de la banda extremeña.
Qué necesario es el rock & roll
Con la Trastienda colmada con público de entre 20 y 40 años, puntualmente apareció la banda en el escenario, cuyos integrantes recibieron ovaciones cuando fueron introducidos por Fito Cabrales. Conformada por el baterista Daniel Griffin, el bajista Alejandro "Boli" Climent, el tecladista Joserra Senperena, además de Fito Cabrales (voz y guitarra), son el saxofonista Javier Alzola y el guitarrista Carlos Raya (productor de los discos del cantautor Quique González), quienes pelean el protagonismo al frente del escenario.
Cabrales se mostró emocionado y sorprendido, olvidándose del micrófono a la hora de acercarse con espontaneidad para saludar a los espectadores con su clásica gorra en la mano, y no paró de reiterar durante todo el recital lo agradecido que se sentía por el recibimiento del público uruguayo.
Excepto por la interpretación de la canción "Quiero beber hasta perder el control", versión de los madrileños Los Secretos, el setlist obvió los primeros dos discos de la banda A puertas cerradas y Los Sueños locos –quizás el único aspecto reprochable– y se focalizó en la presentación del último disco Huyendo conmigo de mí con canciones como "Entre la espada y la pared" y "Garabato". Fueron varias las canciones de Por la boca vive el pez (2006), uno de los discos más populares de la banda, entre ellas "Me equivocaría otra vez", "Como pollo sin cabeza" y la versión de la canción de Extremoduro "Deltoya", uno de los momentos más simbólicos de la noche junto con la interpretación de "Soldadito marinero", cantada de principio a fin por la mayoría del público. Para los bises reservaron "La casa por el tejado", "Acabo de llegar" y "Medalla de cartón".
Conforme el show avanzaba, la banda se consolidaba en el escenario con una propuesta espontánea y fresca, lejana a la improvisación. Con profesionalismo y emoción, brindaron un show compacto y sin fisuras, que se extendió durante más de dos horas ininterrumpidas en un pacto fiel con el público.
Fito Cabrales se consolida como un compositor gestado en el rock más visceral y directo y que, conforme pasaron los años, fue fiel a sus ganas de plasmar inquietudes más adultas y congruentes con su devenir cronológico. Para ello, abandonó la seguridad de la banda que lo dio a conocer y apostó por un proyecto personal que va por su sexto disco y no defrauda, marcando una línea clara.
Carolina Bello
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias