Un voto por Álvaro Villar, un “voto útil”

José W. Legaspi

21.09.2020

Sabido es que quienes nos fuimos del Frente Amplio, a navegar (y naufragar) no tenemos expresión electoral… por ahora.

 

Seguimos, tozudamente, juntando firmas para presentar nuestro propio lema ante la Corte Electoral, así que, hasta el 2024, no "existimos" electoralmente. Sin embargo, cada uno de nosotros, tiene la política arraigada a lo más profundo y no nos es indiferente una elección. No lo fue la pasada, dónde cada uno definió su voto democráticamente, sin "verticalazos" ni "lineazos" de un Supremo (bueno sería que siguiéramos repitiendo atavismos propios de la izquierda más ortodoxa cuando decidimos abrirnos de la misma).

En esta oportunidad, quién esta columna escribe, fiel a sus ideales, de izquierdista, republicano y demócrata, tiene decidido su voto. Y es el mío, exclusivamente. No el del grupo que integro. Es mi voto. 

Y es "un voto útil".

Un voto útil, si. 

Porque entiendo que votar a Álvaro es sumar a un proyecto que implica "otro tipo de gestión" y una más que probable renovación de algo que dejó de ser, hace mucho, una herramienta para los cambios, para convertirse en una herramienta para la permanencia.

Un voto útil, si.

Porque de triunfar Carolina Cosse o Daniel Martínez, será "más de lo mismo", en la gestión y en las caras representativas de la misma. Se me dirá que a Álvaro lo apoyan también algunas de esas "caras". Y es cierto. Como también es cierto que no se puede hacer política solamente con los puros, siempre habrá de aquellos carroñeros que se arrimen "en busca de su porción de asado". No es necesario nombrarlos, amable lector, si usted ha seguido estas columnas de opinión ya sabe a quienes me refiero.

Un voto útil, si.

Porque sólo Álvaro puede llevar adelante una gestión distinta, "implacable contra los abusos de cualquier tipo" o que exija, a los funcionarios a su cargo, cumplir cabalmente con sus funciones. Ya lo demostró en el Hospital Maciel, y si bien la Intendencia de Montevideo no es lo mismo, ese sello estará presente, porque forma parte de su personalidad.

Un voto útil, si.

Porque conozco a Álvaro desde hace mucho. Y si bien ambos cambiamos, también seguimos sintiendo la política desde el mismo lugar: la gestión en bien del colectivo, de la sociedad, lejos del rédito o la mezquina retribución personal o autocomplaciente. Seguimos sintiendo la labor política como un cambio en la vida de las personas, antes que una mejora en la propia. (Si, si, algunos de esos están esperando su porción, ya sé, ya sabemos). Pero confío en aquél, que aún hoy, se conmueve ante la injusticia, ante el llanto o la sonrisa de un niño, o el abrazo de un viejito. Eso no se puede actuar. Es o no es. Y en Álvaro, definitivamente, es.

Un voto útil, si.

Pero que, por lo expuesto desde hace casi 4 años, no es un voto "por cualquiera" que apoye a Villar. Para nada. Los que me conocen saben que no puedo votar la 609, por ejemplo. Es un voto por Fuerza Renovadora, por el sublema. Y punto. Votar al sublema no significa que después, ese voto no termine, precisamente, en quienes no votaría nunca: "los que esperan su porción de asado". La ingeniería electoral es así. Veremos. 

Este es un voto por Álvaro. 

Confío en él. Quiero honestamente que gane. Por el bien de Montevideo. Por abrir una posibilidad de renovación del Frente Amplio, desde afuera, por más que parezca imposible. 

Es un voto desde el corazón. Está en Álvaro Villar no decepcionar este voto, claro. Pero eso ya no depende del votante.

 

 

José W. Legaspi
2020-09-21T21:46:00

José W. Legaspi