Hasta siempre Daniela

Juan Raúl Ferreira

26.12.2018

Me estaba preparando para unas fiestas maravillosas. Una noche junto a gente vulnerable que lucha por salir del flagelo de la adicción. La otra noche cena familiar. El sábado teníamos una fiesta en Maldonado de despedida del año del MPP.

Suena el celular. Era Ivonne Passada que  siempre deja tras cada llamado un halo mágico de alegría. Y recuerdos de una vida desde que  hace ya que nos conocemos... Pero el tono de su voz no era el habitual. Estaba muy afectada: "Murió Daniela Payssé," dijo. Yo se lo compinches que eran ambas entre sí. Pero además me consta cuánto la quería.

 

No se explicar lo que me pasó. Como tantas veces he contado, soy muy emotivo, pero me cuesta hasta hoy, manejar  las tristezas. Nadie me vio llorar en los momentos más tragoicos del exilio, ni cuando hace tres años enterramos a mi padre, o hace poco más de un año despedimos a mi madre. Esta vez sentí primero un nudo a la garganta  y luego un fuerte dolor de angustia en el pecho.

¿Cómo Daniela? Quizás no sufrir antes sea lo mejor para el que se va. Sin duda es lo más doloroso para los que quedamos acá un tiempo más. En el momento que pasan estas cosas nos preguntamos "¿Cómo vamos a hacer sin Daniela?"  Después siempre la vida nos enseña a seguir adelante. Pero en el momento nos parece que no, que no se puede.

No recuerdo hace cuántos años la conozco. Ya con canas, no llevo esas cuentas. Recuerdo sí cómo nos hicimos amigos. Todo pasó por  los derechos humanos. Empezó por su marcado interés en el tema del voto exterior, cuya comisión no gubernamental yo integraba y ella juntos a colegas de varias fuerzas del Frente impulsaba permanentemente. Reunión va, reunión viene, un día me invita a un café en su despacho. En los mismos días (no se si quizás, no fue el mismo día) la vi a ella y Mónica Xavier que me habían invitado sin agenda.

La conversación con ambas fue casi idéntica. Yo integraba la Comisión de DDHH del Partido Nacional. Daniela me mira y me dice "Una pregunta personal, que si no querés no la contestes: ¿Serías candidato a la INDDHH?" Nunca se me había ocurrido y dije "SI" como algo que sale de sorpresa desde dentro del alma. Confieso que nunca me lo había planteado. Ella creía que no faltarían, (y no faltaron), organizaciones sociales que me nominaran.

Y así fue. Se lo informé al Presidente del Directorio del Partido quien me dio su apoyo y dijo que lo plantearía al ¨Honorable.¨ Aunque después la nominación, tomó de sorpresa a los legisladores nacionalistas (¿?). Ello igual hizo posible que fuera electo con el mayor número de votos, unos poquitos blancos se fueron de sala y uno anuló el voto. Los demás acompañaron la propuesta. Nunca le comenté antes a Mónica lo parecido que fueron las dos conversaciones, que cambiaron para tanto bien, el rumbo de mi vida. Fue una transición que necesitaba para estar donde estoy, que me hace sentir tan bien y en Paz con mi conciencia. Todo empezó quizás con Daniela y Mónica tomando un café.

Luego, con Daniela fue quizás con la legisladora que tuvimos que trabajar más. Ella asistía a las reuniones del "Examen Preventivo Universal de la ONU" (EPU) en la delegación oficial de Uruguay, pero la Institución ya había obtenido el reconocimiento de la ONU con el más alto puntaje al que se puede aspirar. Mirtha Guiase y yo íbamos por la INDDHH. También convivíamos con Daniela en las reuniones del Consejo  de Derechos Humanos de la ONU. Muchas veces celebramos el respeto y la admiración que el Uruguay se venía ganando en ese terreno.

Armamos la INDDHH de nada. Empezamos de cero. Pero Daniela estuvo siempre al lado. Era crítica, muy severamente crítica en sus juicios y análisis. También lo era en el Senado. Era una temible adversaria en el debate parlamentario. Tan crítica como uno aspira que sea la gente amiga cuando se trata de evaluar esfuerzos y trabajos. Es el único modo de avanzar y mejorar. Y ella era de naturaleza crítica. Basta recordar su rostro de firmeza real que exhibía al enfrentar al adversario.  Demostró tener ese carácter en cada actuación parlamentaria que protagonizó. Finalizada la polémica supo ser respetada y apreciada por su ocasionales contrapartes. Sus adversarios la respetaban y querían.

Como podría ser al mismo tiempo y con la misma intensidad firme y dura en el debate y el trabajo y siendo la misma Daniela que en ese momento,  compartir su amistad con una sonrisa amable y tierna. Ser comprensible, solidaria y. la palabra que mejor la define: amiga. Daniela era una confiable y entregada amiga de sus amigos/as. Una gran amiga.

El Ministro Danilo Astori, aunque conozco de niño cuando trabajaba con Wilson en la elaboración de los proyectos, tan denostados en el supuesto homenaje que se hizo cuando cumplieron 55 años... (Danilo era , junto a Iglesias, Couriel, Buchelli,el padre del Chileno Rodriguez, Jesús González y Abel Santa Cruz) no es un hombre de sonrisa fácil. Pero su humanidad salió a piel cuando la despedía en el Cementerio visiblemente  emocionado.

Conozco colegas suyas  que aún no han podido superar el golpe. Y que al no estar ahora, piensan cuán necesaria era y cuánto habría que remar para que su ausencia se note, lo menos posible. ¿O será que un día nos encontraremos de la poesía Brecht con alguien que realmente lucho toda la vida y es imprescindible?

 

Dr. Juan Raùl Ferreira

Columnistas
2018-12-26T10:04:00

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