Un paseo por la historia reciente
Luis Fernández
22.03.2019
En 1958 Uruguay solicitó el primer préstamo al FMI. El partido colorado y su colegiado blanco habían despilfarrado todo el "viento de cola" que produjo la segunda guerra mundial.
La inflación y la crisis, produjo el triunfo por primera vez del partido nacional. En 1962, siguió el Consejo de Gobierno integrado por 6 blancos y 3 colorados. En general los colorados representaban a los industriales capitalinos y los blancos defendían a los grandes productores rurales.
Siguió la crisis. No creció el empleo y sí aumentaron la inflación y los compromisos con el FMI.
1966 trajo la Reforma de la Constitución. Volvimos al gobierno unipersonal. Triunfó Gestido, murió enseguida y lo sustityó el inefable Pacheco Areco. El FMI reclamaba todos los días más ajustes. El ex boxeador sabía de eso y golpeó a los trabajadores y estudiantes que protestábamos en contra de sus políticas. Se implantaron las Medidas de Seguridad. Cualquiera podía ser detenido sin conocimiento de la Justicia, se podía allanar domicilios en horas nocturnas, etc. Por algo se le conoce a ese período como "El Pachecato". Es que había que cumplir con el Fondo...
En las elecciones de 1971 con el FA ya instalado en la sociedad, volvió a vencer el partido colorado con Bordaberry a la cabeza.
En 1973 se produjo el golpe militar, ya nadie controló nada. Al FMI no le preocupó nunca el tipo de gobierno, sólo que le pagaran en fecha.
La historia de cualquier país puede tener muy distintos puntos de vista.
Un aspecto histórico de las últimas 6 décadas, puede ser el de analizar cómo nos relacionamos con ese "Gran hermano" que todo lo husmea y todo lo condiciona, llamado FMI.
Los partidos tradicionales, colorado y blanco jamás cuestionaron al FMI; en realidad lo vieron siempre como un "aliado" porque les resolvía las penosas consecuencias de sus gestiones que priorizaban en sectores privados, antes que en el país.
Basta mencionar apenas dos "perlitas": La ruptura de la tablita en 1982 y la crisis del 2002
Entre ambas crisis. Volvimos a votar en 1984 (con ciudadanos proscriptos) y otra vez triunfó el partido colorado, con Sanguinetti. Él también tuvo un importantísmo "viento de cola". Las exportaciones pegaron un gran salto y el petróleo en cambio, bajó a mínimos. Para un Presidente de un país como Uruguay era el "sueño del pibe". Sin embargo no mejoró sustancialmente la economía. Seguimos pagando puntualmente al FMI, los industriales y los ganaderos ganaron mucho, pero la gente siguió casi igual.
Por eso en 1989 ganó Lacalle. Decidió bajar la inversión y permitir la suba de salarios. Pero sin un plan serio para el país, eso se paga con inflación. No olvidemos que en esas época tuvimos un 140% de inflación.
Lacalle siguió pagando puntualmente al FMI, aunque terminó con bancos fundidos.
El segundo período de Sanguinetti, trajo más de lo mismo.
En 1999 ganó Batlle, con un FA creciendo al 30% de los votos.
Batlle prometió hacer un "gobierno divertido"... y casi morimos...pero no de risa.
En 2002 estuvimos apunto del default. Para un país es como la maldición de todos los demonios juntos. Preguntar en Argentina por esa palabreja.
Hasta el FA le dió una mano a Batlle para evitar el default!! Así logramos el último gran rescate del FMI a Uruguay.
Luego de la brutal crisis de 2002, llegamos a las elecciones de 2004, donde vence el FA por primera vez.
El FA da vuelta muchas cosas, pero existe una básica: De priorizar en los intereses de los poderosos se pasa a considerar primero el interés de la gente. Esta es la tortilla que se dió vuelta.
Es cierto que ya hacía algunos meses donde las exportaciones crecían. Fueron precisamente personeros de la oposición los que inventaron el "viento de cola". Nosotros decimos: "Si, hubo viento de cola". Aunque sin comparar diferentes tiempos, me resisto a no pensar en aquellos frigoríficos que trabajaban 3 turnos para mandar carne a la guerra.
Pero no se trata de "vientitos" o "huracanes", sino de qué se hace con esos ingresos. Recordar. Todo el FA como un puño aceptó usar aquéllos 300 millones de U$S, para los más desfavorecidos de la crisis anterior (¿Igual que los tradicionales?)
Luego aparece la mayor política estratégica de la historia reciente. Se utilizaron algunos excedentes en pagar toda la deuda al FMI!!(¿Igual que los tradicionales?)
Se logra salir de los condicionamientos del Fondo. Se obtiene una excelente imagen en el mundo de las finanzas. Las calificadoras de riesgo mejoran notablemente la nota de Uruguay.
¿Cuál es el cambio sustancial? Ahora podemos solicitar préstamos a cualquiera y negociamos los intereses. ¿Verdad que la política del FMI, era otra? Nos decían: "Lo tomas o lo dejas" y si no lo tomabas, afuera te cobraban más aún que el FMI.
Hoy es tan diferente la situación, que cuando Uruguay avisa que va a emitir deuda, por ejemplo 2.000 millones de U$S, tiene oferentes por más de esa cifra. Y lo insólito es que los prestadores de dinero compiten entre ellos bajando el interés para que Uruguay los elija a ellos!! ¿Lo sabías? (¿Igual que los tradicionales?).
Hagamos una precisión. Ningún dirigente del FA tiene buena opinión del FMI y claro que no salió gratis esa "independencia". Ha cambiado notoriamente el perfil y monto de la deuda. No debemos considerar la deuda bruta como maliciosamente lo hacen algunos; existen importantes reservas y lo que se debe discutir es la deuda neta, o sea la diferencia entre la bruta y las reservas.
Seguimos siendo deudores. Claro que sí. Pero reenegamos del FMI de la única forma posible que un país pequeño y dependiente puede hacerlo.
También pudimos hacer lo que hizo la ex-presidente de los argentinos Cristina Kischner. Dijo: "Los del FMI son unos perversos, entonces no le pagamos nada y chau" Pavada de estadista la señora!!. Se creyó que el viento de cola sería eterno o lo dió a entender. Gastó todas las reservas hasta muy próximo a las últimas elecciones. Llegó Macri que gobierna con cabeza de nuestros tradicionales y así le está yendo al hermano país.
Volvamos a Uruguay. Luego del planteo anterior, seguramente es válido hacerse una preguntilla.
¿Si tuviéramos la calamidad que triunfara la restauración, acaso no verían como un botín esa millonada de dólares que tenemos de reservas?
Cuidado! no nos referimos a corrupción o robo. NO. Estamos pensando en políticas donde se producen transferencias muy legales. Por ejemplo: Rebaja de impuestos sustitiyendo eso con reservas. La gama de ejemplos puede ser infinita, claro.
Ese gobernante nos podría decir: "Se terminaron las reservas, debemos pedir al FMI"
¿Acaso algo parecido no pasa en la vecina orilla?
Luis Fernández
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias